Policía que mató a hincha de Lazio: "El disparo fue accidental"
El agente se declaró destrozado por la muerte de Gabriele Sandri, pero sostuvo que el primer tiro lo hizo al aire y el segundo mientras corría en el lugar que se enfrentaron hinchas del club romano y Juventus.
El policía italiano que el domingo mató de un disparo a un aficionado de SS Lazio, al intentar disolver una pelea entre seguidores del citado equipo y de Juventus de Turín, aseguró que el trágico suceso fue un accidente.
"No miraba ni apuntaba a nadie. Estaba al menos a 200 metros, ¿cómo habría podido apuntarle? El primer disparo lo hice al aire y el segundo fue mientras estaba corriendo, accidentalmente. Ahora lo sé, estoy hundido", dijo Luigi S., de 31 años, en declaraciones recogidas por el diario Corriere della Sera.
El policía italiano se declaró destrozado por la muerte de Gabriele Sandri, que viajaba en auto con otros aficionados de Lazio y se dirigía a Milán para asistir al partido de su equipo contra Inter.
"Destruí dos familias, la del muchacho y la mía", afirmó.
Gabriele Sandri, de 26 años de edad y famoso en Roma por ser un conocido DJ amigo de algunos jugadores de Lazio, falleció inmediatamente como consecuencia de un impacto de bala en el cuello.
El agente hizo dos disparos, supuestamente al aire para intimidar, pero uno de ellos alcanzó el cuello del aficionado. "Fue un trágico error", dijo Vincenzo Giacobbe, jefe de la policía de Arezzo.
El trágico suceso ocurrió durante una pelea en un área de servicio de una carretera de Arezzo (centro de Italia) entre aficionados de Lazio, que acudían a Milán a presenciar el encuentro contra Inter, y de Juventus, que se dirigían a Parma.
La muerte del joven provocó la reacción inmediata de los hinchas en toda Italia. Los aficionados radicales de Atalanta obligaron a suspender el encuentro contra AC Milan, a los siete minutos, bajo la amenaza de crear graves disturbios, y en Roma, mientras, otros hinchas asaltaron un cuartel de la policía y la sede del Comité Olímpico Nacional Italiano (CONI).
Balance policial por graves disturbios
Una cuarentena de heridos entre las fuerzas del orden, tres aficionados arrestados y daños incalculables, es el primer balance de los actos de "guerrilla urbana" que tuvieron lugar en Roma, tras la suspensión del duelo entre AS Roma y Cagliari ante la muerte horas antes en Arezzo de un seguidor lacial.
Durante los actos violentos desatados por los fanáticos romanistas y laciales, que se unieron en sus ataques ante las fuerzas del orden e instituciones deportivas, unos 44 agentes necesitaron atención médica, si bien sus heridas son leves.
El más afectado, aunque su estado no reviste gravedad, fue uno de los policías presentes en el asalto "ultra" al cuartel de la unidad móvil y que resultó golpeado en el hígado con una barra de hierro, siéndole estimado por los doctores un periodo de recuperación cercano a la veintena de días.
De momento, son sólo tres (dos hombres y una mujer) los hinchas arrestados, si bien no se descarta que en las próximas horas aumente el número, pues la policía se encuentra revisando las imágenes registradas en los actos vandálicos, pese a que la mayoría de los aficionados actuaron con el rostro cubierto.
Los tres detenidos son acusados de devastación, saqueo, daños, lesiones e incendios. Dos de ellos (una pareja con el rostro cubierto) fueron arrestados por el asalto al cuartel de la policía.
Además, la fiscalía de Roma anunció que solicitará el agravante de terrorismo para todos los detenidos con motivo de los actos violentos acontecidos en la capital.
De momento, son incalculables los daños causados por la "guerrilla" romana, ya que los fanáticos destrozaron y quemaron autos, motocicletas, cubos de basura y todo tipo de material urbano que se encontraron a su paso; así como zonas de las instalaciones del CONI, robando además computadores.
Sólo los daños a la sede del CONI están siendo evaluados en una cifra inicialmente no inferior a los 100.000 euros. (Agencias)