Precauciones para evitar "ahogarse" con las deudas
Ser precavido, hacer presupuestos y no dejarse tentar son algunas de la claves para no vivir en función de los compromisos financieros y "trabajar para pagar".
Una tarjeta o un crédito bancario pueden ser la llave para acceder a muchos productos que con el sueldo no sería posible adquirir, pero los problemas surgen cuando estos se transforman en el principal medio para financiar las necesidades de un hogar, más allá de los ingresos familiares.
Por ello, tomar algunas precauciones antes de adquirir compromisos puede ser clave para evitar caer en la angustiante situación de vivir y trabajar sólo para pagar deudas.
El estándar de vida
Para mucha gente joven, vivir sola o casarse implica un cambio drástico en su estándar de vida, ya que están acostumbrados a vivir a un nivel que es el resultado de muchos años de trabajo de sus padres, por lo que existen más posibilidades de que las necesidades que identifican como básicas incluyan, por ejemplo, televisores de última generación, equipos de sonido, computadores, reproductores MP3 o MP4, internet, cable o decoración.
El problema, explica Gomestic.com, es que estas personas generalmente llevan poco tiempo incorporadas a la fuerza laboral, por lo que su sueldo no les permite incurrir en todos estos gastos en forma inmediata, ante lo cual la salida es el crédito.
Cargar productos a las tarjetas de crédito entrega la posibilidad de tener cosas inmediatamente y no tener que esperar hasta ganar el dinero suficiente para comprarlas al contado, pero ese ahorro de tiempo hoy implica costos a pagar: Los intereses y el tiempo a futuro que el consumidor pasará cancelando las cuotas del producto.
Tener paciencia, evitar las tentaciones, las compras impulsivas e ignorar la necesidad de igualar rápidamente el estándar de vida anterior, son algunas de las medidas para escaparse de adquirir compromisos financieros innecesarios.
Averiguar los intereses que tendrá esa compra, aprovechar la posibilidad de adquirir en cuotas con precio contado y, una vez llegada la cuenta, tratar de cancelar una cifra mayor que el pago mínimo, son estrategias que contribuyen a hacer más llevaderas las deudas contraídas.
Jerarquizar y gastar bien
Ser precavido y reservar una parte de los ingresos para ahorro es también una buena medida para contar con respaldo en caso de tener gastos extras en algún momento del mes.
En este sentido, tener todo el ingreso que no se gasta en cuentas, destinado a pagar deudas implica ser vulnerable al momento de tener que enfrentar una emergencia y por ende, un terremoto en la economía familiar.
Para evitar una situación así, hacer un presupuesto mensual ayuda a organizar los gastos y los pagos que hay que hacer, destinar dinero al ahorro, identificar los productos que se podrán comprar durante ese período de tiempo, otras adquisiciones que tendrán que esperar e identificar si es necesario tener todos los elementos de crédito que se poseen.
Por último, es útil preferir las compras con dinero en efectivo, aprovechar las ofertas, esperar las épocas en que bajan los precios y estar informado sobre hacia dónde van sus ingresos, son medidas que contribuyen a no adquirir deudas innecesarias y a usar el crédito sólo para inversiones trascendentales, sin transformarse en su esclavo. (Cooperativa.cl)