Chile juega otra final

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Autor: Cooperativa.cl

Este jueves se le presenta a Chile la oportunidad de sumar tres puntos y quedar ya en el grupo de los clasificados directamente al mundial.

Por José Antonio Prieto, desde Venezuela.

 

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Chile juega este jueves otra final en la fase clasificatoria sudamericana con miras al mundial de Sudáfrica. Esta frase hay que guardarla y recuperarla en cada fecha, así será hasta el final, y como tal, Chile tiene que prepararse para dar el máximo.

 

El partido de esta tarde ante Venezuela no es la excepción: primero por el rival, un equipo que ahora tiene como objetivo clasificar y no sólo participar; y segundo por lo estrecha que está la tabla después que los que venían en los últimos lugares han sumado puntos.

 

Esta noche en Puerto La Cruz, la selección tiene una de esas oportunidades que no hay que dejar pasar. (Foto: Photospport)

Da la sensación que Macelo Bielsa se decidió por mantener el mismo equipo que inició ante Bolivia, con la excepción de José Pedro Fuenzalida. En los entrenamientos y tal vez como nunca el entrenador ha trabajado en forma separada con los 11 que supuestamente jugarán, digo supuestamente ya que en más de una ocasión, cuando sale la nómina oficial hay dos o tres sorpresas.

 

Los 11 para este jueves tendrían que ser Bravo en el arco; Fuentes como líbero, Medel y Jara como marcadores; Carmona, Estrada y Cereceda en el medio; Morales como volante adelantado; Alexis Sánchez, Suazo y Beausejour en ataque.

 

La formación tiene la lógica de aquella frase, "equipo que gana, repite". Aquí se da, pero esa frase nada dice de las circunstancias en que se alcanzó la victoria. El punto está en el desgaste físico que realizaron en la altura de La Paz más el cambio de clima, del frío al calor húmedo del caribe venezolano.

 

Esta será otra prueba para las decisiones que tomará Bielsa y por supuesto para los futbolistas chilenos. Es habitual que en estas circunstancias vengan bajones notorios en rendimiento y por ende en el resultado. La interrogante por resolver era si jugadores frescos en lo físico podrían tener un espacio? La respuesta ya la dio Bielsa. No habrá cambios, salvo el de Estrada por Fuenzalida.

 

Venezuela tiene todo preparado para celebrar un paso más arriba en su historia futbolística. Juegan de locales, en condiciones ideales por clima y con una cancha muy buena donde la pelota corre muy rápida, con su público que les reconoce como nunca una victoria ante Brasil (amistoso) y el empate ante Uruguay en el Centenario. Es decir, el plato de fondo se llama Chile y lo tienen servido en la mesa.

 

El fútbol venezolano tiene de todo un poco: hay talentosos como Arango, Vargas y el "zurdo" Rojas; experimentados como Rey y Vielma y el mismo Arango; y un grupo de jóvenes fuertes en lo físico. Me tocó hacer la cobertura del partido que se jugó hace cuatro años en San Cristóbal donde Chile ganó por 1-0. El partido fue permanentemente favorable a los locales, que desperdiciaron muy claras ocasiones. Los dirigidos por Juvenal Olmos, aguantaron en una cancha muy pesada por la lluvia, y al final Pinilla acertó en una jugada con rebote.

 

Los hinchas siempre apuestan por la victoria, es lógico, ese es su papel, el de la esperanza, de los deseos de festejar, de la ilusión y nadie se los puede quitar. Pero también deben estar preparados para sufrir. Y hoy no será la excepción. Venezuela va a salir con todo a buscar el gol, va a presionar físicamente y Chile va por lo mismo. Es decir otra vez al todo o nada. Hay que acostumbrarse a las emociones fuertes y al sufrimiento.

 

Este jueves se le presenta a Chile la oportunidad de sumar tres puntos y quedar ya en el grupo de los clasificados directamente al mundial. Muchos dirán, pero sí recién van seis fechas y queda mucho, cierto, pero cuando un equipo ya está en esa franja se hace más fuerte y en cada partido está jugando por mantener la posición o subir en la tabla. Es muy distinto estar mirando desde abajo, esperando que otros pierdan posiciones. Esta noche en Puerto La Cruz, la selección tiene una de esas oportunidades que no hay que dejar pasar.