Norman Foster, el "arquitecto de la era global", ganó el Premio Príncipe de Asturias
Británico triunfó en Artes por "anticipar la única polis posible del siglo XXI".
Su obra está "al servicio del desarrollo sostenible", destacó el jurado.
El acta del jurado destaca la obra de "alcance universal" de este arquitecto y urbanista que ha sabido conjugar "la calidad estética, la reflexión intelectual y el diálogo entre territorio y ciudadanía, a través de un original dominio del espacio, la luz y la materia".
Las obras de Foster se encuentran dispersas por todo el mundo y entre las últimas que ha acometido están la estación subterránea de Florencia, la pirámide destinada al diálogo mundial entre las religiones en Astana, la nueva capital de Kazajistán, y el mayor aeropuerto del mundo, construido en Pekín para los Juegos Olímpicos.
Al galardón de las Artes, primero en fallarse en la presente edición de los ocho que concede anualmente la Fundación Príncipe de Asturias, optaban en esta ocasión 26 candidaturas procedentes de once países.
La propuesta de Foster llegó a las últimas votaciones del jurado junto a las de la actriz inglesa Vanessa Redgrave, el cineasta español Carlos Saura, el escultor estadounidense Richard Serra, el cantautor español Joan Manuel Serrat y el compositor español Cristóbal Halffter.