Comisión de Micheletti señaló que "Honduras sigue abierta al diálogo"
Canciller señaló que la restitución de Zelaya "se escapó de las manos" del Ejecutivo.
El depuesto presidente pidió medidas más drásticas a la comunidad internacional.
La comisión de diálogo del nuevo presidente de Honduras, Roberto Micheletti, ante Oscar Arias, mediador de la crisis política que vive este país, expresó que "Honduras sigue abierta al diálogo".
Además, en el nuevo gobierno "no queremos amnistía, queremos la verdad", expresó Arturo Corrales, uno de los miembros de la comisión de Micheletti, que esta noche regresó de Costa Rica, donde los enviados del depuesto presidente Manuel Zelaya dieron por "fracasado" el diálogo con el mandatario costarricense, Oscar Arias.
"Queremos la verdad y no amnistía para nada, para nadie", Arias "le está diciendo al mundo lo que ya (hace) rato veníamos diciendo nosotros", acotó Corrales.
Por su parte, el nuevo canciller hondureño, Carlos López, quien además es miembro de la comisión de Micheletti, dijo que la restitución de Zelaya, que de nuevo propuso Arias, "se escapó de las manos del poder Ejecutivo, porque en Honduras existe una separación de poderes".
Agregó que la iniciativa de Arias presentada en San José a las comisiones de Zelaya y Micheletti será entregada a los tres poderes del Estado de Honduras, para que determinen si se continúa en el proceso de diálogo para buscar una salida pacífica a la crisis.
López explicó que aceptar el regreso de Zelaya como presidente sería "transgredir" la ley, algo que, subrayó, hizo el depuesto mandatario, por lo que fue acusado y se le dictó orden de captura.
Zelaya pidió medidas más drásticas
El depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, ha pedido a la comunidad internacional medidas "más drásticas" contra los golpistas de su país en una carta que ha dirigido al presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
En una entrevista que publica este jueves el diario alemán Süddeutsche Zeitung, Zelaya pide "medidas económicas y personales contra los golpistas", si bien no precisa qué tipo de acciones espera.
Zelaya asegura que ha decidido emprender la marcha de regreso a su país en vista del fracaso de la mediación de Arias, que atribuye exclusivamente a la negativa de los golpistas a aceptarla.
Preguntado si él hubiera aceptado el plan de siete puntos, incluido el abandono de su proyecto de convocar un referéndum para modificar la Constitución, asegura que "sí, pero los siete puntos ni se llegaron a discutir porque los golpistas no los aceptaron".
Respecto a las inculpaciones del presidente hondureño en ejercicio, Roberto Micheletti, quien le acusa de violar la Constitución y de haber cometido otros delitos y le amenaza con encarcelarlo, Zelaya sostiene que siempre ha estado dispuesto a someterse a la Justicia, pero "no a un régimen ilegal".
"Para ello sería necesario un tribunal internacional e imparcial, que también juzgara a los que han cometido este delito del golpe", dice.