Manuel Zelaya anunció que acampará en la frontera con Honduras
Reafirmó su total voluntad de volver a su país, pese al cerco militar.
Dirigente social que acompañaba a su familia fue detenido.
El presidente hondureño Manuel Zelaya informó que establecerá un campamento por un par de días en la localidad de Las Manos, para así esperar al resto de las personas que vienen desde Honduras a reunirse con él, y así retornar a su país.
"Vamos a estar durmiendo estos dos días acá. La comunidad internacional nos acompaña, todos los presidentes han condenado esta oligarquía económica que dio este golpe. No estamos solos, estamos con Dios", afirmó enérgicamente Zelaya.
El presidente constitucional señaló que establecerán carpas y distribuirán alimentos a quienes lo acompañan, llamándolos a agradecer la hospitalidad del pueblo de Nicaragua y al "comandante Daniel Ortega".
"Estamos organizando un proceso de resistencia contra el golpe", afirmó el depuesto jefe de estado, mientras intentaba hablarle a sus seguidores al tiempo que algunos detractores gritaban "Mel, basura, fuera de Honduras".
En tanto, se informó que el dirigente social Rafael Alegría, quien viajaba junto a la familia de Manuel Zelaya, fue detenido por militares en la zona de Arenales, a una hora de Nicaragua.
Posibles entradas
Previamente, en contacto con una radio local, Zelaya había asegurado que maneja diversas opciones para regresar a su país y así franquear el cerco dispuesto por las autoridades del gobierno de facto, que instalaron un fuerte contingente en la frontera con Nicaragua,.
"Podemos entrar por la frontera que tenemos con El Salvador y con Guatemala, en todos lados estamos organizados", dijo Zelaya a la local Radio Globo, abriéndose a la posibilidad de "aterrizar directamente en San Pedro Sula".
"Tengo helicópteros listos, tengo aviones listos, tengo al pueblo acompañándome", advirtió el gobernante constitucional, quien ya logró ingresar, por un breve espacio de tiempo, a suelo hondureño, a través de territorio nicaragüense.
Las declaraciones y emplazamientos mutuos se suceden mientras Zelaya se mantiene en el sector de Las Manos, mientras sus partidarios lo esperan rebelándose contra el toque de queda dispuesto por el gobierno de Micheletti, y mientras lugareños acusan el crimen y la tortura de un joven simpatizante del mandatario derrocado.