Otro sondeo ratificó ventaja del Partido Conservador frente a las elecciones británicas

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Autor: Cooperativa.cl

El conglomerado es la principal oposición al gobierno laborista de Brown.

Los comicios generales se realizarán el próximo 6 de mayo.

Gordon Brown podría entregar el gobierno a los conservadores.

El Partido Conservador, el principal de la oposición, amplió su ventaja en intención de voto en el Reino Unido, según revelaron los resultados de una nueva encuesta divulgada este miércoles, que sitúa a los laboristas en tercera posición por detrás de los liberaldemócratas.

El sondeo elaborado para el diario The Times anima a la formación que lidera David Cameron en la recta final hacia las elecciones generales del 6 de mayo. Además, estableció que el auge experimentado recientemente por el Partido Liberal Demócrata de Nick Clegg podría disminuir.

El apoyo a los conservadores se incrementó en cuatro puntos con respecto a la semana pasada, al obtener 36 por ciento; el mismo que gozaba antes del primer debate televisivo, que provocó el repunte de los liberaldemócratas.

La formación de Nick Clegg perdió tres puntos, con 28 por ciento de respaldo, aunque esta agrupación continúa por encima del Partido Laborista, de Gordon Brown, en el poder, que obtiene el 27 por ciento.

Estos datos hacen pensar que los "tories" (conservadores) podrían obtener 290 diputados y quedar a 36 de la mayoría parlamentaria de 326, mientras que los laboristas conseguirían 245 escaños, y los liberal demócratas, 84.

Del sondeo se desprende también que el 44 por ciento de los votantes opina que ha llegado "el momento para el cambio" aunque no están seguros de que se trate del "momento de los 'tories'".

El traspié de Brown

El primer ministro británico, Gordon Brown, calificó a una votante como "mujer intolerante" cuando aún estaba abierto el micrófono que usaba en un acto de campaña, causando revuelo en los medios.

Gillian Duffy, de 65 años, le hizo a Brown preguntas desafiantes sobre temas como la inmigración, el crimen y la economía mientras hablaban en la localidad de Rochdale, en el norte de Inglaterra.

Al término del intercambio verbal y tras meterse en el automóvil oficial, Brown no se dio cuenta de que todavía tenía pinchado en el traje el micrófono de la cadena Sky News y se le escuchó decir que la conversación con Duffy había sido un "desastre".

"Fue un desastre, nunca me debieron poner con esa mujer", dijo el primer ministro mientras hablaba con un colaborador suyo. Preguntado qué era lo que Duffy le había dicho, Brown contestó: "De todo, era una mujer intolerante", motivo por el cual el primer ministro debió ofrecer disculpas públicas.