Falla geológica amenaza con borrar del mapa barrio de Colombia
Cientos de casas se han derrumbado en el sector de San Francisco.
La alcaldesa de Cartagena estimó en unas 2.300 las familias que deben ser evacuadas.
Una falla geológica activada por las intensas lluvias del pasado noviembre amenaza con borrar del mapa el barrio de San Francisco, en la ciudad colombiana de Cartagena de Indias, pues hasta el momento se han derrumbado cientos de casas que han dejado sin techo a igual número de familias.
La portavoz de la Pastoral Social de la Arquidiócesis de Cartagena, Claudia Mesa, explicó a EFE que esta situación se registra desde "finales de noviembre del año pasado, pues el terreno tiene un empozamiento de líquidos que se han venido moviendo y los vecinos han podido sentir ligeros desplazamientos".
"Con la ola invernal la situación se ha acrecentado últimamente y ya lo que vemos es el desprendimiento de la falla geológica, que es lo que ha provocado que las casas estén en el suelo", detalló.
Jorge Sáenz, vecino de San Francisco desde hace 28 años, relató que el problema "se agravó el pasado sábado cuando hubo un temblor por una falla geológica y eso fue lo que hizo que las casas se rajaran y se colapsaran de un momento a otro".
Además, aseguró que "los veteranos dicen que el distrito les dio el aval para construir. Les dio un terreno que era legal, por lo que este barrio no es invasión, esto es legal".
En este sentido se manifestó también Miriam Imitola, quien vive en este barrio ubicado en el cerro de La Popa y observó que "el distrito hizo la urbanización y a cada persona le dio un terreno o una casa ya hecha. Ellos fueron los que fallaron si no estudiaron antes el terreno".
Alcaldesa estimó en 2.300 las familias que deben ser evacuadas
La alcaldesa de Cartagena, Judith Pinedo, cifró en Caracol Radio el total de familias que deben ser evacuadas en más de 2.300, población que según ella dobla a la del municipio de Gramalote en Norte de Santander (noreste), que en diciembre desapareció tragado literalmente por la tierra, saturada por las intensas lluvias.
Pinedo recordó que la evacuación paulatina de familias de este tradicional barrio cartagenero arrancó el pasado año, por lo que no se han registrado heridos ni muertos tras los derrumbes y apenas quedan cerca de 247 hogares por ser demolidos.