Directora de "Valiente": Hacer animación para adultos implicaría cambiar una cultura
Brenda Chapman conversó con Cooperativa sobre su carrera y su visión sobre los proyectos animados.
Además del impacto de este tipo de películas en los adultos y sus futuros proyectos.
Se tomó un receso en su apretada agenda de proyectos animados para venir a Chile. Como parte de la segunda edición del Festival Internacional Chilemonos, hará una master class que atrayendo la atención de los medios, sobre todo después de quedarse con el Oscar a la Mejor Película Animada este año con "Valiente".
Ella es Brenda Chapman y cuenta con un historial vinculado a reconocidas producciones. Y es que en su evolución se ha probado como escritora, guionista, directora, productora y animadora.
"Hay mucha pasión en todo lo que he hecho. 'La sirenita' fue uno de los primeros filmes en los que trabajé y estaba muy entusiasmada con este por que es uno de mis cuentos favoritos. Pero la idea principal de mi trabajo es siempre tratar de encontrar algo a lo que pueda hincarle el diente. Cuando siento la pasión, cuando me enamoro de la historia, funciono mejor al momento de desarrollarla", dijo a Cooperativa en una entrevista exclusiva.
Esto "al contrario de cuando me he quedado con la impresión 'oh, esto es estúpido, no quiero trabajar en eso'. Eso ha pasado una sola vez con un cortometraje en el que hice, pero no he dejado que suceda de nuevo".
Desaparición de lo tradicional
Chapman se ha preocupado del desarrollo de storyboards y la supervisión de historias. Con ello formó parte de la producción de "La bella y la bestia", "El rey león" y "El jorobado de Notre Dame", entre otras antes de que partiera a Dreamworks y se hiciera cargo de "El príncipe de Egipto" (1998), bajo el responsabilidad de ser la primera directora de una película de grandes estudios.
Consultada por su preferencia al momento de trabajar con un tipo de animación u otra, Chapman resaltó que "tengo una gran simpatía por el CGI y estoy preocupada por la posible muerte de la animación tradicional, porque hay tanta gente que va a ver el otro tipo de películas. Temo que las futuras generaciones no tendrán la experiencia de otros que les enseñen cómo hacerla. Cómo continuar esa forma de arte".
Ahora, "los estudios ya no están haciendo filmes en 2D, lo que me preocupa mucho. Cuando Disney en los setentas se dio cuenta de que muchos de sus animadores estaban muriendo y que no tenían a nadie que pudiese cubrir esa posición, fue el momento en el que iniciaron el California Institute of the Arts para tratar de enseñar la tarea a gente más joven. Pasaron por un periodo en que las películas no eran tan buenas y los dibujos tampoco, pero al menos sucedió".
Entonces, "lo que no veo ahora es que los estudios hagan ese esfuerzo por lo tradicional nuevamente, y que eso sólo lo van a tener sólo un puñado de gente, por lo que va a costar mucho hacer un largometraje".
Envidiando a Japón
Su llegada al estudio de "Cars" y "Toy story" cambió su carrera. Esto,"principalmente, porque en Pixar me dio la oportunidad de crear mi propia historia, mi propio filme y ver evolucionó esa visión", con "Valiente".
"Cuando trabajé en Disney y Dreamworks anteriormente -continuó-, por lo general, se trataba de lo que el estudio me ponía en frente o lo que alguien más había presentado. Por lo que Pixar se transformó en mi primer proyecto realmente apasionado".
En tanto, ante la crítica de Danny Boyle ("Trainspotting", "Trance") sobre que el cine se está "pixarificando", o sea sólo produciendo películas familiares y dejando de lado las historias para adultos, Chapman señaló que "justamente por eso Pixar es tan exitoso, porque los adultos quieren ver esas películas también. No están solamente dejando a sus hijos en el cine y se van, sino que obtienen algo de ellas".
"Ahora en cuanto a lo que concierne algo más duro, violento, dramático o de humor inapropiado para los niños, creo que lo han intentado, pero cuando la audiencia estadounidense ve animación inmediatamente piensa en niños. Es difícil que los adultos asistan solos a ver un filme animado", continuó.
Es por eso que "creo que existe un problema en Estados Unidos referente a la animación y es que no podemos crear películas sólo para adultos, aunque hay muchos de nosotros (animadores) que nos encantaría hacerlas. Envidiamos a Japón, porque allá son capaces de hacerlo, ya que ven a la animación como una forma más de hacer cine, no es sólo para niño. Implicaría cambiar una cultura, para lograrlo".
Hombres no tan tontos
Cuando Chapman trabajó en "Valiente" fue desvinculada del proyecto, por descuerdos en torno al tratamiento de la historia. "El look del filme, la historia y los personajes estaban establecidos cuando me fui, pero le hicieron pequeños cambios para cautivar a los niños de las audiencias que fueron demasiado para mi gusto".
"No habría hecho a los hombres tan tontos como resultaron ser, en mi versión no lo eran. Pero a pesar de todo estoy bastante orgullosa con lo que resultó. La historia madre-hija era lo importante para mí, y eso llega tanto a los niños como a los adultos", concluyó.
Brenda Chapman actualmente está cerrando una consultoría comprometida con Lucasfilms sobre un proyecto que tomará otra persona y que no quiso entregar detalles.
Cerrada esa tarea en mayo, retornará a Dreamworks, donde "estoy trabajando en dos o tres proyectos que me han ofrecido y voy a solventar un proyecto propio que en primera instancia voy a plasmarlo en un libro".
"Todas las ideas son realmente entretenidas y todo lo que puedo decir es que, sea cual sea el que salga adelante, tendrá un protagonista femenino y uno fuerte. Esa es mi meta", sentenció.