En el vehículo de la PDI se encontró droga y se indaga su procedencia.
Uno de los detectives involucrados había sido sancionado por apremios ilegítimos contra un detenido.
A medida que pasan las horas siguen conociéndose antecedentes del enfrentamiento a balazos que sostuvieron carabineros y detectives la madrugada de este martes en la Población La Legua, que se saldó con un policía muerto y dos heridos y en cuya clarificación trabajan 12 fiscales de la Unidad de Delitos Violentos de la Fiscalía Metropolitana Sur, además de personal de la PDI y de la policía uniformada.
Los investigadores ya establecieron que el cuerpo de Miguel Faúndez Morales, el cabo de 21 años de la 50ª Comisaría de San Joaquín que resultó fallecido, presenta al menos tres disparos: uno en el tórax, por la espalda, otro en un brazo y otro en una pierna.
El auto marca Hyundai en el que se encontraba Faúndez en ropa de civil junto al sargento segundo Rodrigo Chávez Albornoz -quien fue herido en un brazo- registra al menos 24 impactos de bala.
Marcelo Molina Muñoz, inspector de 36 años de la Brigada Móvil de la PDI, es el otro policía lesionado. Recibió un balazo en el hombro y, según se ha conocido, en su hoja de vida presenta una sanción administrativa de 21 días de arresto por apremios ilegítimos contra un detenido.
En tanto, al interior del vehículo en el que llegaron los detectives al sector donde se registraron los hechos se encontró droga. En estos momentos se están cotejando las bitácoras para indagar si corresponde con los procedimientos policiales registrados oficialmente.
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| Una docena de fiscales realiza los peritajes del caso. (Foto: UPI) |
La evolución de los hechos
El confuso incidente se desarrolló a partir de las 04:40 horas, cuando Sergio Sánchez, guardia de seguridad de una empresa de plásticos ubicada en la intersección de las calles Carlos Valdovinos y Juan Nieto llamó al número 134 para denunciar la presencia de un grupo de sospechosos a bordo de un automóvil en el estacionamiento de un servicentro Shell abandonado.
"Sentí un ruido, entró un vehículo con tres sospechosos. Optamos nosotros por llamar a la PDI", relató Sánchez.
A bordo del vehículo se hallaban los funcionarios de la SIP de la mencionada unidad policial que, vestidos de civil, desarrollaban un procedimiento de vigilancia dado que tenían el dato de que una banda de delincuentes planeaba robar un cajero automático desde un servicentro Terpel ubicado a un par de cuadras.
Cuando llegó al lugar el vehículo de la PDI, los detectives rodearon el auto, uno de ellos abrió la puerta apuntando con su arma y -según declaran los testigos- los carabineros al verse sorprendidos abrieron fuego, reaccionando también los detectives con disparos.
"Empezaron a disparar altiro, de adentro hacia afuera, y ellos (los detectives) respondieron. De ahí llegó Carabineros y está lo que se ve ahora", relataba esta mañana el guardia Sánchez.
Diligencias en cursoEl fiscal jefe de la Zona Metropolitana Sur, Raúl Guzmán, dijo que por parte de los investigadores "se va a determinar la trayectoria de los proyectiles, y con esos antecedentes se van a realizar las diligencias" siguientes.
"Hay bastantes vainillas en el lugar, en el sitio del suceso", declaró el persecutor, confirmando que "efectivamente el funcionario (de Carabineros) que fallece, fallece dentro del vehículo que estaba estacionado".
Mientras los peritajes continúan a esta hora en el lugar del suceso, los detectives involucrados, el carabinero Rodrigo Chávez y el mencionado guardia de seguridad siguen siendo interrogados en el cuartel del OS-9 de Carabineros en Ñuñoa.
Los investigadores evalúan la posibilidad de llevar adelante una reconstitución de escena en las próximas horas.
