El ejemplar fue escrito por Claudia Apablaza.
"Expone ciertas locuras dentro de la subjetividad de una mujer de 30 años", dijo su autora.
El ejemplar se presentará a las 19 horas en la sala Acario Cotapos.
Un libro de cuentos dividido en tres partes y en cuyas páginas se reflejan los conflictos con el cuerpo, las tecnologías y la posmodernidad de personajes inmersos en un sistema neoliberal, es lo que reúne "Todos piensan que soy un faquir".
En el ejemplar, que se presenta este martes en la Filsa, se evidencia cierta crítica de su autora, la escritora nacional Claudia Apablaza a través de tres momentos claves: "La primera parte son cuentos que están relacionados con el choque entre una mujer de 30 años y un sistema neoliberal que interviene en su desarrollo emocional y su desarrollo laboral y su desarrollo espiritual".
"Después viene una parte donde estos personajes se detienen y dicen 'bueno, nos vamos a detener a pensar un poco lo que viene' y aparece la parte racional del texto. Después viene la parte final de cómo estos personajes pueden liberarse de todo lo anterior", sostuvo a Cooperativa Apablaza.
Para Apablaza, se trata de un libro íntimo que "está trabajado desde las sensaciones y percepciones personales que tienen los personajes a partir de esa construcción social, la globalización, cómo una mujer puede desde su subjetividad relacionarse con un sistema de ese tipo".
"Trata nuevamente el tema de la mujer y la inserción dentro de un sistema, pero en uno neoliberal. Un sistema en que si bien uno está incluido, también genera ciertas paranoias y ciertas locuras dentro de la subjetividad de una mujer de 30 años", agregó.
Historias como la de una mujer vegetariana obsesionada con su figura y espiritualidad son parte de los textos con los que se encontrará el lector. Según Apablaza, en el libro "también se refleja como uno se empieza a psicotizar con el propio sistema y este te empieza a comer".
