La música de Los Balcanes, de la mano de sones tan reconocibles como las bandas sonoras de filmes como "Underground" y "Tiempo de gitanos", conquistaron a más siete mil personas que disfrutaron de un energético show.
Revise a Bregovic presentando en vivo "Mesecina"
Por Gonzalo Rodríguez gonzalor@cooperativa.cl
Pese a que en la tarde del viernes en la playa chica de Cartagena reinaba el desconocimiento sobre el espectáculo que horas más tarde ofrecería el artista bosnio Goran Bregovic, fueron más de siete mil personas las que finalmente cayeron bajo su influjo.
Pasadas las 21:00 horas y cuando el sol ya había comenzado su retirada, una veintena de artistas líricos y sinfónicos chilenos salieron a escena en la obertura del espectáculo cuyo proscenio se ubicó en la avenida paralela a la playa, la cual está a más altura que las arenas y cuenta con una separación de cemento, que servía de una especie de barrera para evitar que más de alguien terminara en las aguas.
No pasó mucho antes de que se les unieran dos mujeres belgas, encargadas de los coros. Los músicos de Bregovic sorprendieron a los presentes al irrumpir desde detrás del público, vestidos a la usanza balcánica y portando instrumentos de bronce.
Fue una especie de invitación que más tarde fue creciendo, conforme los sones de corte gitano se fueron haciendo escuchar en la noche y con Bregovic ya instalado en medio de los artistas, ataviado de blanco y premunido de su guitarra.
Temas como "Kalashnikov", "Mesecina", "War", "Ringe, ringe, raja", y otros de bandas sonoras de filmes de Kusturica a estas alturas resultan muy cotidianos, y sirvieron de puente para disfrutar del resto de las 26 canciones de un show que se extendió por más de dos horas, espectáculo que este sábado 19 se repetirá en el parque La Bandera de San Ramón y el domingo 20 en el Parque Araucano en Las Condes, éste último evento con invitación que previamente debía ser retirada en oficinas municipales.
Cuando arreciaba el sol, la gente poco y nada sabía acerca de la actuación programada por responsable de la "Orquesta para bodas y funerales", en el marco del festival teatral Santiago a Mil.
A esas horas la principal inquietud era lograr el mejor chapuzón, el mejor bronceado o lograr el gol de la victoria en el caso de las muchas pichangas que albergaba la playa chica del popular balneario de la Región de Valparaíso.
Sólo algunos se daban el tiempo para preguntar a quien anduviera con alguna credencial en el sector donde se ubicó el escenario "¿Amigo, va a actuar alguien?", y fueron horas en que el apellido Bregovic mutó en cientos de variantes, así como su nacionalidad.
Otros más enterados del show pero sin mucha información sobre la cara del músico soltaban frases como "Goran, mi familia te ama", al lograr ver detrás del escenario a alguna persona de aspecto extranjero y de pelo largo. (Cooperativa.cl)
