Se mantuvo el resultado por 2-0 por el que ganaban los brasileños.
El Estadio Morumbí fue castigado con un partido.
El Tribunal de Disciplina de la Conmebol oficializó el título de Sao Paulo en la última versión de la Copa Sudamericana, además de aplicar un castigo de 100 mil dólares para los brasileños y para el otro protagonista de la polémica final, Tigre de Argentina.
El cotejo disputado el pasado 12 de diciembre en el Estadio Morumbí fue suspendido por el árbitro chileno Enrique Osses luego de que al final de la primera etapa el elenco trasandino se negara a regresar al terreno de juego, cuando el marcador estaba 2-0 a favor de los paulistas.
El cuadro bonaerense acusó que los jugadores fueron amenazados con armas de fuego por los policías locales, aludiendo a esto para negarse a reingresar al terreno de juego.
En definitiva, la comisión integrada por el uruguayo Adrián Leiza, el boliviano Alberto Lozada y el colombiano Orlando Morales determinó mantener el resultado a favor de Sao Paulo, con lo que se oficializa a los brasileños como campeones del torneo.
Además, se sancionó al Estadio Morumbí con un partido y a ambos elencos que deberán cancelar 100 mil dólares los que serán descontados automáticamente de los derechos de televisión y patrocinios.
Los clubes tiene un plazo de ocho días para tratar de revertir la sanción impuesta por la Conmebol.
