Woody Allen: "Odio envejecer"

El cineasta Woody Allen señaló que uno de sus grandes problemas de su diario vivir tiene relación con sus 73 años de edad, pese a que -asegura- tiene certeza en regresarar a este mundo de una u otra forma.

Aún con el pelo ya canoso y las arrugas más marcadas, Allen parece estar en plena forma, pero a la hora de hablar de sus quejas más usuales señala que son "las mismas cosas de siempre, las existenciales".

"Estoy más viejo. Me lastimo el pie y tarda dos meses en curarse. Y eso no me gusta. Antes hacía ejercicio por placer. Ahora tengo que hacerlo. Igual que con las cosas que debo comer. Odio envejecer", afirmó.

Woody Allen se ríe porque está siendo objeto de vandalismo. Hace cinco años, se erigió una estatua tamaño natural en bronce del realizador en la ciudad española de Oviedo, donde más tarde rodó parte de su nuevo filme, "Vicky Cristina Barcelona" y ahora los cazadores de souvenirs viven robando del rostro esculpido sus característicos anteojos.

"Los anteojos son de bronce igual que la estatua, y están soldados. Pero vienen con sopletes y los sacan. Es un problema constante", relata con una sonrisa.

Con Penélope y Scarlett

Dueño de un humor autodestructivo habla de todo, desde fantasear con un menage à trois con Penélope Cruz y Scarlett Johansson hasta ver a un psiquiatra.

"Es algo en lo que pienso. Pero no demasiado. Es decir, lo he pensado. Probablemente no sabría por dónde empezar", indicó.

En otro tema afirmó que no es hipocondríaco, pero si en cambio se reconoce "alarmista, que es muy distinto". "Si tengo los labios resecos, pienso que es un cáncer de cerebro", señala a modo de ejemplo.

Cuando la charla gira hacia su obsesión con la muerte, piensa en qué regresará reencarnado: "Siempre pensé en una esponja".