"El Puma" Rodríguez fue amo y señor en el Arena Santiago
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Autor: Cooperativa.cl
Su show tuvo como marco 5.000 fans, en su gran mayoría mujeres.
Se preocupó hasta el más mínimo detalle, como la dirección de luces y cámaras.
Su show tuvo como marco 5.000 fans, en su gran mayoría mujeres.
Se preocupó hasta el más mínimo detalle, como la dirección de luces y cámaras.
Con una voz que denota el paso de los años, pero que mantiene una más que aceptable condición, el cantante José Luis Rodríguez se presentó la noche del jueves ante unas 5.000 personas en el Arena Santiago.
Allí realizó una presentación de casi dos horas, en la que simultáneamente a la interpretación de sus canciones, iba dando instrucciones precisas sobre la ubicación de las cámaras que realizaban las tomas oficiales del evento, y que eran proyectadas en dos pantallas gigantes, la dirección de las luces principales, la potencia de algún instrumento o de su propio micrófono.
Para mala suerte de los técnicos, éstos no siempre estaban atentos y cosecharon más de un reto de parte de "El Puma", en particular los responsables de las luces que resaltan al artista principal y que no estuvieron prestas por ejemplo a alumbrar al embajador de la India y su familia, por más que Rodríguez se esforzaba en señalar donde se encontraba ubicado el diplomático, a quien dedicó la canción "Amigo".
Fueron alrededor de dos horas de recital, el que tuvo su inicio a las 21:16 horas con un clip de tres minutos en el que se mezclaron recortes de prensa de la carrera del artista y fotografías de "El Puma" con otros colegas de ayer, como Gloria Estefan y un joven Marco Antonio Solís, entre muchos otros.
Durante todo su show estuvo acompañado de nueve músicos, a cargo de la percusión, órganos, bajo, batería, guitarra eléctrica e instrumentos de viento, a quienes se añadían dos parejas de baile, que realizaban coreografías en los temas más movidos como las célebres "Amalia Rosa" o "Pavo Real", tema que fue seguido de pie y premiado con una larga ovación.
Tuvo otros momentos más íntimos donde echó mano a clásicos como "Voy a perder la cabeza" o Culpable soy yo", en una primera parte de su presentación, en la que también tuvo palabras de agradeciendo para el público que se acercó al recinto capitalino.
"Gracias Chile, gracias a Dios que me regala el privilegio de verlos nuevamente", dijo a poco de comenzar su concierto, mezcla de religiosidad que también se vivió en otros pasajes en los que lanzó una larga predica como antesala de temas como "Tengo derecho a ser feliz", "Se busca" -habla de Jesús- y "El himno de la alegría".
José Luis Rodríguez durante su paso por Santiago. (Foto: UPI)
Su amigo Sandro
Contrariamente a lo que uno pudiese esperar el homenaje a Sandro fue breve, seis canciones, las cuales inició con un clip con imágenes del "Gitano" y un relato previamente grabado en la que daba cuenta de su admiración por el argentino, por su talento sobre todo su lucha por seguir viviendo.
Ya con las luces encendidas nuevamente, "El Puma" proclamó a partir de ese minuto todos aplausos irían dirigidos a Sandro, para después pedir al cielo para que se prolongará por más tiempo la estadía del intérprete de "Una muchacha y una guitarra" en la Tierra.
Para el cierre, José Luis retomó canciones de su trayectoria como "Baila mi rumba", "Agarrense de las manos", más un bis con "Diosito Santo", en una puesta en escena que dejó exultantes a sus fanáticas de antaño, que cuando el reloj marcaba las 23:19 horas no hacían más que desvivirse en frases como "está como el vino", "mijito rico", o "valió la pena", en un concierto en el que a José Luis Rodríguez le lanzaron desde peluches, flores gigantes de material plástico, hasta ropa interior.
Pausa
Bis
