La cantante, que se tomó fotografía en un lugar arqueológico prohibido de Chichén Itzá sin los correspondientes permisos que establece la ley mexicana, dijo que sus abogados están cooperando en el caso.
La cantante mexicana Thalía aceptó su responsabilidad en la publicación de unas fotografías que se tomó en la zona arqueológica de Chichén Itza (Yucatán), sin la autorización de las autoridades correspondientes.
En mayo pasado, la esposa del empresario estadounidense Tommy Mottola, realizó un tour privado por esta zona arqueológica, bajo el permiso de su hermana, la directora regional del INAH, Federica Sodi Miranda, en contra de disposiciones legales.
En esta visita, la cantante pudo acceder a lugares prohibidos para el público en general y hasta posó con medio cuerpo en la boca de "la serpiente emplumada", sin el permiso requerido.
"Si incurrí en la publicación indebida de algunas imágenes solamente debo de ponerme al día con el INAH; es por eso que ahora mis abogados están cooperando en todo lo que se requiera, ya que gracias al INAH se sigue preservando y conservando la riqueza de nuestra cultura prehispánica", indicó Thalía en un comunicado.
La cantante explicó que su "intención de explorar y compartir experiencias con ustedes siempre ha salido del fondo de mi corazón y nunca esperé que el resultado fuera uno de esta índole". (EFE)
