El hecho retrasó el traslado de los equipos a Gotemburgo.
En uno de los conciertos en la ciudad irlandesa una chilena se subió al escenario.
Tres noches se presento U2 en Dublín, su ciudad natal, y unos 80 vecinos aburridos de la bulla producida por la música y por el desmantelamiento de los equipos decidieron bloquear durante varias horas los caminos e impedir que se trasladen hasta Gotemburgo, lugar de las próximas fechas de la gira.
Dado que los equipos fueron trasladados finalmente con retraso, los organizadores temen que el escenario no esté listo a tiempo para los conciertos que U2 tiene previsto ofrecer el viernes y el sábado en el estadio Ullevi de Gotemburgo.
Los vecinos destacaron que la protesta no se dirige contra la banda, sino contra el permiso dado por las autoridades de la ciudad para desmontar el escenario por la noche.
En el segundo de estos conciertos, una chilena tuvo la oportunidad de repetir la hazaña -ya lo había hecho en Chile en 2006- y volvió a subirse al escenario a bailar con Bono y U2.
