En el Nescafé de las Artes se dio cita el clan Parra e invitados.
Sonaron desde temas como "Arauco tiene una pena" hasta hits de Los Tres.
Como buena cueca, no hay primera sin segunda, y así fue que los Parra festejaron en dos funciones seguidas el 93 aniversario del nacimiento de Violeta Parra.
Se trató de dos conciertos que tuvieron el mismo repertorio, pero que a la postre resultó más emotiva y lograda en su segunda versión de la noche, quizás por tres elementos: no se repitieron pequeños y contados problemas con micrófonos, algunas parejas del público terminaron bailando cueca en los pasillos y abajo del escenario, y los mismos artistas ya habían logrado más sintonía y soltura en el cuidado espectáculo que contó con la dirección escénica de Ramón Núñez.
En lo general en ambos shows la gente acompañó con las palmas, letras completas o coros enseñados in situ a los artistas que salieron a escena.
Angel Parra padre abrió los fuegos con "Violeta se fue a los cielos" en la voz principal, para luego dar paso a su hija Javiera quien tomó la posta con "La jardinera" secundada en los coros por Isabel y Angel Parra papá. un Valcecito "Tirarirará" y "lo que más quiero con Isabel como guaripola sirvió para soltar aún más a la gente.
Angel Parra hijo también rindió tributo a su abuela, por medio de la interpretación en solitario y en guitarra clásica de dos temas instrumentales, el segundo de ellos una energética y recargada "Casamiento de negros", que cosechó aplausos.
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| "Angelito" se lució en la guitarra. (Foto: Cooperativa.cl) |
Otro momento notable de la jornada fue la reacción que provocó escuchar en el primer y segundo recital, la letra de "Arauco tiene una pena" en voz de Angel Parra padre, quien también había dado forma a un coral "Volver a los 17".
También hubo espacio para recordar a los fallecidos Antar Parra y su hijo Miguel, así como para revivir por un instante al famoso dúo de Angel e Isabel Parra en "Parabienes al revés".
Alvaro Henríquez y los temas de los Tres vinieron a continuación: "He barrido el sol" -con un Angel Parra hijo simplemente de otro planeta-, "Quien es la que viene ahí", y "arriba quemando el sol", con Isabel y su hermano Angel en los coros.
Con los músicos en masa sobre el escenario, se entonó "El día de tu cumpleaños, de autoría de la propia "Viola chilensis "como la inmortalizó Nicanor Parra.
Tras un compacto de imágenes familiares donde Violeta compartía con los suyos el gusto por la cueca, vino el turno de canciones de Roberto Parra entre ellas, "La vida que ho he pasado", "El chute Alberto", "El conventillo".
En la segunda función, se añadió al repertorio "La perra con el perro" y se invitó a los presentes a sacar a bailar a sus acompañantes. Asi tres parejas se acercaron hasta la parte delantera y danzaron al rirmo de las palpas y los sones del contagiadoso tema, lo mismo que otros que bailaron pero desde el fondo del teatro.
Ambos cierres fueron dando "Gracias a la vida", por parte de un público orgulloso del trabajo, voluntarismo, lucidez, y vigencia de Violeta Parra y su legado.
