La actriz culminó recientemente las grabaciones de "Pobre Gallo" y presenta por estos días la obra "Un Jardín Secreto".
Comentó que quiere morir "con las botas puestas".
La actriz visitó Una Nueva Mañana.
Esta mañana, la actriz Gabriela Hernández visitó Una Nueva Mañana de Cooperativa, donde se refirió al éxito de la teleserie "Pobre Gallo", donde interpreta a una mujer mapuche, y que por estos días finalizó sus grabaciones.
Además, comentó su rol en "Un Jardín Secreto", obra del fallecido dramaturgo nacional Jorge Díaz, quien fue íntimo amigo de la actriz y que estas semanas y hasta mediados de junio, se está presentando en el teatro de la Corporación Cultural de Las Condes.
"Es sobre una pareja de la tercera edad, de 70' y tantos. Ellos van andando en bicicleta, frenan en los semáforos, comienzan una conversación, primero no muy amistosa, después se hacen amigos, después se gustan, se enamoran y en esto van descubriendo que las bicicletas son fijas. Se van dando cuenta que se conocían, van descubriendo que estuvieron casados. Y se vuelvan a casar enamorados, pero también recuerdan todo lo que pasó", dijo sobre el montaje al que calificó como "esperanzador".
"La salud es lo único que hace perder este goce por la vida. Tengo un solo riñón de nacimiento que me ha dado varios problemas siempre, pero ahora de mayor como que se apagicuó. El día que le de la pataleta yo creo que ahí paro las patas y espero que sea en el escenario. Con las botas puestas. Me gustaría que fuera rápido, no sentirme mal para no echar a perder la obra, pero que fuera realmente a punto de terminar una temporada de teatro", culminó.
