El australiano Steve Irwin se encontraba realizando un documental cuando recibió un aguijonazo en el pecho, que aparentemente hizo llegar el veneno del pez directamente a su corazón.
El "Cazador de cocodrilos" Steve Irwin murió este lunes a consecuencia de la picadura de una raya de aguijón cuando buceaba durante el rodaje de un documental sobre estos animales, informó la radio australiana ABC.
El actor y naturalista australiano estaba buceando cerca de Cairns, en Low Isles, costa nororiental de Australia, cuando ocurrió el accidente.
El aguijón -que mide unos 30 centímetros- se le clavó en el pecho y, al parecer, llegó hasta el corazón, por lo que murió casi en el acto, pese a que el veneno de las rayas no suele ser mortal para los humanos.
Irwin, quien tenía 44 años, se hizo mundialmente famoso desde la década de 1990 gracias a la serie televisiva "Cazador de cocodrilos", transmitida por el canal de cable Animal Planet.
El célebre australiano había heredado su amor por los reptiles de su padre, Bob Irwin, propietario de una granja de cocodrilos en la Sunshine Coast del estado australiano de Queensland.
Irwin creó controversia en varias ocasiones por sus atrevidas acciones, como darle de comer a un gigantesco cocodrilo cuando llevaba a su bebé recién nacido en brazos.
En otra ocasión, en aguas de la Antártica, el controvertido presentador de programas científicos se acercó mucho a las ballenas cuando les daba de comer, y se deslizó muy cerca de pingüinos y cetáceos durante la grabación de otro documental, que llevaron al propio primer ministro australiano, John Howard, a defenderlo públicamente. (EFE)
