El presidente Robert Mugabe ganó por retiro las elecciones de marzo pasado.
Su rival Morgan Tsvangirai será el primer ministro de la nación africana.
El presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, y el líder opositor, Morgan Tsvangirai, llegaron este jueves a un acuerdo para formar un gobierno de unidad nacional y sacar al país de la crisis política y económica en que se encuentra.
El presidente sudafricano y mediador, Thabo Mbeki, anunció que, tras más de mes y medio de negociaciones, se ha alcanzado el acuerdo, que se firmará el próximo lunes en Harare, por el que Mugabe permanecerá como presidente y Tsvangirai será el primer ministro, aunque no se entregaron más detalles.
El acuerdo llevará por primera vez desde la independencia de Zimbabue del Reino Unido, en 1980, a que Mugabe comparta el poder que ha ejercido en solitario 28 años.
La situación de Zimbabue era insostenible tras la segunda vuelta de las elecciones legislativas, celebrada el pasado 27 de junio y a la que Mugabe se presentó en solitario tras la retirada del candidato del Movimiento para el Cambio Democrático (MDC), Morgan Tsvangirai, que acusó a las milicias y partidarios de la Unión Nacional Africana de Zimbabue-Frente Patriótico (ZANU-PF, de Mugabe) de atacar y asesinar a decenas de sus seguidores.
En las elecciones, desarrolladas el pasado 27 de marzo, Tsvangirai ganó en la primera vuelta, aunque no consiguió el 50 por ciento de votos necesarios para llegar a la Jefatura del Estado en esa ronda, y ante su retiro, Mugabe fue elegido presidente, pero la comunidad internacional no reconoció su triunfo.
El Reino Unido, el resto de la Unión Europea y Estados Unidos impusieron sanciones a personas y empresas ligadas al gobierno de Mugabe y la situación económica de Zimbabue, muy deteriorada desde que hace una década el gobernante inició una caótica reforma agraria, acabó por desmoronarse.
En estos momentos, Zimbabue sufre escasez de suministros básicos, como los alimentos, tiene un desempleo que alcanza el 80 por ciento y su inflación es la mayor del mundo, de al menos 11 millones por ciento, según reconocen los propios organismos oficiales.
