La CTA Autónoma criticó los incrementos tarifarios de entre el 300 y el 2.000 por ciento que se han realizado en todo el país.
Miles de personas participaron de las manifestaciones
Trabajadores y organizaciones sociales de Argentina salieron a la calle envueltos en mantas y con velas en las manos para protestar contra la "brutal" subida de tarifas dictada por el Gobierno en los servicios públicos básicos y por su efecto en las economías domésticas en pleno invierno austral.
"El pueblo argentino está sufriendo los efectos de aumentos de tarifas que no tienen en cuenta el equilibrio social ni la posibilidad de poder pagarlos en su totalidad", apuntó la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) de Buenos Aires en un comunicado.
Por ese motivo, la CTA Autónoma -una de las dos ramas en las que se divide la central- y organizaciones sociales como Consumidores Libres y La Alameda convocaron a los ciudadanos a manifestarse con una frazada (manta) y una vela en el emblemático Obelisco porteño, un gesto que denominaron "frazadazo".
La CTA de la capital argentina reclama que el Gobierno de Mauricio Macri, que llegó al poder en diciembre, considera la luz, el agua, el gas y el transporte -servicios en los que aumentaron los precios- una "mercancía" y no "un bien social", por lo que los usuarios se han convertido en "meros clientes".
"Está todo aumentando y los sueldos no aumentan. Macri está haciendo muchos aumentos que no corresponden", dijo a EFE María Zaldivar, una de las manifestantes.
En el mismo sentido se expresó Luis Vilela, para quien "cada día suben más las cosas", por lo que instó al presidente y a su gabinete a que hagan por que la situación se revierta.
La organización sindical critica los incrementos tarifarios de entre el 300 y el 2.000 por ciento que se han realizado en todo el país.
"Es imposible que un sector de la población tenga acceso a estos servicios si este tarifazo no se retrotrae", dijo a Efe durante la protesta Alejandro Bodart, dirigente nacional del Movimiento Socialista de los Trabajadores-Nueva Izquierda.
En varias ocasiones, Macri ha reconocido haber tomado medidas que eran "dolorosas" para la población pero aseguró que era por el bien de los argentinos y para "sincerar" la economía tras el Gobierno de su antecesora Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015), que a su juicio dejó un "Estado devastado", cargado de corrupción y un 700 % de inflación acumulada en la última década, entre otros problemas.
