Felipe Quispe consideró "normal la guerra civil" en el país altiplánico, donde "siempre ha habido guerra, tiene que haber guerra a como dé lugar".
El líder del Movimiento Indígena Pachakuti de Bolivia, Felipe Quispe, afirmó este miércoles a la emisora peruana Radioprogramas que "con las armas" y "a través de una guerra civil" se definirá el futuro de Bolivia.
"(En esta región) siempre ha habido guerra, tiene que haber guerra a como dé lugar. Tiene que haber y así vamos a ver quién maneja este país", señaló el llamado "mallku" (representante) de los indígenas aimaras bolivianos.
Quispe definió las actuales protestas en su país como "una lucha racial de blancos e indígenas" en la que "el pueblo originario reclama auto gobernarse".
Según el dirigente "están muy serias las cosas... vamos a ver cómo actúan nuestros opresores, y dependiendo de lo que van a hacer, vamos a responder".
El también líder de la Confederación Sindical Unica de Trabajadores Campesinos de Bolivia, dijo que "es tiempo de que (los indígenas) manejemos el poder político y que nos devuelvan los invasores nuestros territorios".
El líder aimara resaltó que este pedido no busca un retorno al siglo XVI, época de la conquista española de América, ya que en la actualidad los bolivianos "estamos rodeados de tecnología de punta" y "no volveríamos a usar el quipu (especie de contador andino) que usaron los incas Atahualpa o Huáscar".
Quispe consideró "normal la guerra civil" y puso como ejemplo la llegada de los españoles a la ciudad peruana de Cajamarca en 1532, quienes, según dijo, usaron la Biblia, la pólvora, los caballos y los sables para matar a cientos de indígenas.
El líder del partido político Movimiento Indígena Pachakuti declaró también al canal N de la televisión por cable peruana que "el principal remedio" a las protestas en su país "será la nacionalización de los hidrocarburos, (que) es lo fundamental para todos los que estamos movilizados".
Explicó que las movilizaciones durarán por lo menos un mes más y que "los opositores estamos en las calles cortando los caminos carreteros, cortando los productos agropecuarios del campo".
"(Esos métodos) los vamos a profundizar más, a intensificar más a nivel nacional", concluyó.
Carlos Mesa presentó su renuncia a la Presidencia de Bolivia el lunes 6 de junio, en medio de una grave crisis política y social en ese país, y pidió a los sectores sociales que se manifiestan en el país que permitan al Parlamento reanudar sus sesiones para analizar su salida. (EFE)
