En medio de la crisis que enfrenta el país altiplánico, el comandante en jefe Juan Aranda Granados salió a desmentir rumores y señaló que las FF.AA. "se mantienen unidas en el respeto a la democracia".
El alto mando militar boliviano reiteró su respeto a la Constitución de su país y descartó que las Fuerzas Armadas tengan la intención de interrumpir el proceso democrático.
"Las Fuerzas Armadas se mantienen unidas en el respeto a la democracia y no admiten que se siga manejando ningún nombre de los miembros de la institución en afanes ajenos a sus específicas actividades", declaró el comandante en jefe, almirante Juan Aranda Granados.
El jefe uniformado dijo que se autorizó la emisión de un comunicado para descartar los rumores que circularon sobre un posible gobierno cívico-militar en gestación, los que mencionaron al general Marcelo Antezana como su cabeza.
La declaración de los militares se produjo en medio de la fuerte crisis que enfrenta el Gobierno de Carlos Mesa, con protestas que se extienden por el país, y luego que la Iglesia Católica anunciara que mediará para buscar "una solución consensuada" a "los graves problemas sociales e institucionales" del país. (Agencias)
