Presidente del Congreso boliviano denunció plan para tomar el Legislativo

El presidente del Congreso de Bolivia, Hormando Vaca Díez, denunció la existencia de un plan para tomar la sede del Poder Legislativo, el cual debía ser ejecutado la semana pasada.

El parlamentario acusó al Gobierno de no alertarle sobre la existencia de un grupo paramilitar que pretendía tomar el martes 20 de enero el Congreso, como él mismo señaló en una sesión.

"Ni yo (como presidente del Senado) ni el presidente de (la Cámara) de Diputados fuimos informados", manifestó Vaca Díez, quien explicó que recibió la información de "fuentes externas amigas", aunque no especificó cuáles.

Desde que en octubre de 2003 asumió el poder el presidente de Bolivia, Carlos Mesa, por sucesión constitucional y sin apoyo partidario -tras un grave conflicto social que propició la salida del anterior gobierno-, los sectores sociales han acusado en reiteradas ocasiones al Legislativo de representar a antiguas formas de poder oligárquico.

En las últimas semanas, varios líderes sindicales han amenazado con cerrar la sede parlamentaria si no se obtienen respuestas a la demanda popular de convocar a una asamblea constituyente, que permita la inclusión de las mayorías marginadas en la dirección del país.

Uno de los grupos que se refirió a esa posibilidad fue la Central Obrera Boliviana (COB), con motivo de la celebración de un congreso nacional de esta institución, el viernes pasado, en Cochabamba.

El secretario ejecutivo de la COB, Jaime Solares, anunció que los representantes de 70 organizaciones afiliadas al sindicato dieron un plazo de 20 días al Gobierno para que atienda a sus demandas. Si no hay una respuesta pasado ese período, anunció que tomarán medidas de presión en las calles, entre ellas "el cierre temporal del Parlamento, porque son una punta (grupo) de inútiles".

Al respecto, Vaca Díez insinuó la posible responsabilidad de Solares en el plan sedicioso, al afirmar que el jefe sindical "ha estado activando y alentando esas cosas". Añadió que "es uno de los extremistas alentadores". Como respuesta, Solares declaró este miércoles que esas acusaciones buscan "desprestigiar" a la COB.

En relación con la actuación del Ejecutivo, Vaca Díez anunció la próxima convocatoria de una sesión reservada del Senado y agregó que serán citados los ministros para que aporten información. En tanto, el Gobierno mantuvo silencio, pese a las consultas hechas a las autoridades por los medios de comunicación. (EFE)