El ministro de Desarrollo explicó que se intentará llegar a acuerdos con las compañías afectadas por el decreto para ver qué sucederá con los bienes, aunque descartó que sea el Estado el que se quede con ellos.
El ministro de Planificación para el Desarrollo de Bolicia, Carlos Villegas informó que el Gobierno no tiene la intención de expropiar ni los equipos ni las propiedades de las empresas petroleras que fueron nacionalizadas.
"Si no se llega a un acuerdo, ellas (las empresas) sabrán qué hacen con sus instalaciones. El decreto de nacionalización en ningún momento señala que se harán expropiaciones", afirmó Villegas.
La nacionalización decretada el 1 de mayo por el presidente boliviano Evo Morales impone a las empresas la obligación de entregar el 100 por ciento de la producción al Estado que pasó a ser propietario de la producción debajo de la tierra.
Por su parte las empresas Repsol YPF y la brasileña Petrobrás, que en conjunto controlan el 70 por ciento de las reservas de gas natural de este país, anunciaron el inicio de negociaciones con el Gobierno para modificar sus contratos bajo el nuevo decreto supremo de nacionalización de hidrocarburos.
Petrobras dijo el viernes en un comunicado que recurrirá a un arbitraje internacional en Nueva York si en un plazo de 45 días no logra un acuerdo con el Gobierno sobre el precio del gas que importa desde Bolivia.
Su contrato con la empresa estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) establece "los mecanismos que debe regir la negociación" y que, si en 45 días no hay acuerdo, "el próximo paso es un arbitraje internacional en Nueva York". (Agencias)
