Brasil insistirá en los biocombustibles para no depender del gas boliviano

El gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva anunció este lunes que redoblará sus esfuerzos para diversificar las fuentes de energía de Brasil y terminar con la dependencia del gas boliviano.

Lula dijo que dio instrucciones al ministro de Minas y Energía, Silas Rondeu y al presidente de Petrobras, Sergio Gabrielli, de trabajar "para que Brasil sea independiente" de las fuentes externas.

"Brasil no puede estar dependiendo de ningún país, cuando se trata de una cuestión energética importante para el desarrollo. Tenemos condiciones para trabajar en eso", recalcó Lula durante su programa semanal de radio "Café con el presidente".

Señaló que su Gobierno ya está invirtiendo en fuentes de energía alternativa, biomasa y "agroenergía".

"Queremos fortalecer otra matriz energética con la construcción de una cantidad enorme de usinas (centrales) para que podamos producir biodiesel, lo que va a generar millones de empleos y a generar otro factor de independencia para Brasil", declaró.

El Ejecutivo, empresas privadas, y cooperativas campesinas, Brasil impulsan la producción de diesel proveniente de semillas oleaginosas como el ricino, la palma, el girasol y la soja.

Recientemente, Lula calificó como "error histórico" el hecho de que Brasil popularizara el consumo interno de gas natural de una fuente externa que no le pertenece, como es el gas boliviano.

Brasil importa unos 26 millones de metros cúbicos de gas boliviano a través de un gasoducto común que abastece el 50 por ciento del mercado interno del hidrocarburo.

El 70 por ciento del consumo de gas del estado de Sao Paulo, el motor industrial de Brasil, con un tercio del Producto Interno Bruto del país (PIB), depende del gas boliviano.

Por su parte, el portavoz de la Presidencia, André Singer, dijo a periodistas que la reunión semanal del presidente con ministros de su gabinete de coordinación política dio respaldo este lunes a los planes de Petrobras de reducir la dependencia de Brasil del gas boliviano.

Brasil tiene ya una matriz energética muy diversificada y cerca del 65 por ciento de la electricidad que consume proviene de fuentes hidroeléctricas.

En la reunión, el Gobierno definió que es importante para Petrobras invertir en la exploración de gas en Brasil con este objetivo, dijo Singer.

Petrobras ha identificado importantes reservas de gas libre (no asociado a yacimientos de petróleo) en la llamada Cuenca de Santos, en el litoral del estado de Sao Paulo.

También ha localizado reservas en la cuenca de Campos, en aguas del estado de Río de Janeiro, y en plena selva del estado de Amazonas (norte).

Sin embargo, todavía necesita hacer cuantiosas inversiones en pozos, plantas de comprensión y gasoductos para convertir esas reservas en gas y llevarlas al mercado interno.

Lula y su Gobierno han recalcado la necesidad de reducir la dependencia del gas extranjero, pero el presidente recalcó este lunes su interés por un proyecto de Caracas de trazar un gasoducto de más de 8.000 kilómetros de longitud y 20.000 millones de dólares para llevar gas venezolano al mercado brasileño y argentino.

Ese gasoducto "puede resolver el problema del suministro de gas para el siglo", dijo Lula, al agregar que explora nuevas formas negociadas para lograr el desarrollo de toda América Latina. (EFE)