El socialdemócrata que competirá con el presidente brasileño en el balotaje del 29 de octubre afirmó que dijo "mentiroso" a su rival porque le gusta "hablar las cosas delante de las personas".
El candidato presidencial brasileño Geraldo Alckmin afirmó que en el debate televisivo del pasado domingo mostró al presidente y aspirante a la reelección, Luiz Inácio Lula da Silva, que el pueblo está "indignado" con la corrupción en su gobierno.
"Creo que exterioricé un sentimiento de indignación del pueblo brasileño. Fui un instrumento del pueblo", dijo Alckmin en Sao Paulo, en referencia a las duras acusaciones que hizo contra Lula en el debate realizado por el canal de televisión Bandeirantes.
Las acusaciones de Alckmin a Lula sorprendieron hasta a los más veteranos analistas políticos y calentaron la campaña para la segunda vuelta de la elección presidencial, que se realizarán el 29 de este mes.
Alckmin, candidato del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), arremetió contra Lula, del Partido de los Trabajadores (PT), por los casos de corrupción en que están involucrados amigos y colaboradores suyos.
El candidato opositor llamó a Lula "mentiroso" y "sin autoridad moral" para hablar de ética, porque ha tolerado la corrupción en el PT y en su gobierno, y dijo que el mandatario "no asume responsabilidades".
Alckmin afirmó este lunes que a pesar de la dureza con la que trató a Lula no fue agresivo en el debate y aseguró que durmió "con la conciencia tranquila" porque todo lo que dijo fue "verdadero".
"Me gusta hablar las cosas delante de las personas", aseveró Alckmin, quien hasta hace unas semanas era considerado un político tímido y sin gracia, pero que con su inesperado paso a la segunda vuelta ha mostrado que será un duro rival para Lula. (EFE)
