El presidente y candidato a la reelección votó junto a su esposa en Sao Bernardo do Campo, en el cinturón industrial de Sao Paulo donde hace 20 años fundó el Partido de los Trabajadores.
El presidente y candidato a la reelección Luiz Inácio Lula da Silva afirmó al votar que el resultado de la segunda vuelta electoral de este domingo "demostrará que Brasil está unido", y aludió así a la victoria que le auguran todas las encuestas de opinión.
"Al contrario de lo que muchos creen, Brasil no está dividido", dijo el mandatario tras emitir su voto en la ciudad de Sao Bernardo do Campo, en el cinturón industrial de Sao Paulo, donde hace más de tres décadas comenzó su vida sindical.
Lula agradeció "al pueblo" y aseguró que "la verdad ha quedado establecida", en otra referencia indirecta al contundente triunfo que le vaticinan los sondeos de opinión, que le atribuyen una ventaja de más de 20 puntos porcentuales por encima del líder socialdemócrata Geraldo Alckmin.
El presidente también agradeció "a Dios" que las elecciones se decidan en una segunda vuelta, que en su opinión ha permitido "consolidar la democracia" y le dará "una mayor legitimidad" a quien sea elegido.
"En la segunda vuelta se sintió el clima de campaña que no hubo en la primera y la democracia brasileña ganó con eso", afirmó.
Lula, quien vestía una camisa blanca y una chaqueta beige, llegó al colegio electoral acompañado por su esposa, Marisa Leticia, la que optó por una camiseta roja con la estrella blanca del Partido de los Trabajadores (PT), un emblema que ella ayudó a diseñar cuando su esposo fundó esa formación, en 1980.
El líder del PT fue recibido por decenas de seguidores que le aclamaron como si ya hubiese ganado y entonaron las canciones de la campaña, en medio de muchos apretujones y cierta histeria por llegar cerca de candidato.
Tras votar, el presidente y su esposa posaron para los fotógrafos formando con los pulgares e índices la letra "L", la inicial que ha caracterizado la campaña de Lula.
En la primera vuelta, el pasado 1 de octubre, Lula obtuvo el 48,61 por ciento de los votos, contra el 41,64 de Alckmin. (EFE)
