Rio Grande do Sul es la región más golpeada, con 21 fallecidos y cerca de 4.000 evacuados.
Gran parte de las víctimas vivía en Muçum, municipio que en gran parte está sumergido por las lluvias.
Se trata de la peor tragedia por un evento climático extremo en el estado de Rio Grande do Sul.
El número de fallecidos por el paso de un ciclón extratropical que avanza desde el lunes por la región sur de Brasil aumentó a 22 en los estados de Rio Grande do Sul y Santa Catarina.
Rio Grande do Sul, fronterizo con Argentina y Uruguay, es la región más golpeada por el ciclón, con un balance preliminar de 21 fallecidos y alrededor de 4.000 evacuados, según el gobernador regional, Eduardo Leite.
Esta es la peor tragedia por un evento climático extremo en Rio Grande do Sul, donde hasta ahora era poco habitual el registro de ciclones extratropicales.
La otra víctima fatal vse reportó en el vecino estado de Santa Catarina, donde un hombre perdió la vida cuando un árbol se cayó sobre el vehículo en el que viajaba.
Alrededor de 60 municipios de Rio Grande do Sul han sufrido daños como consecuencia de las fuertes rachas de viento y el gran volumen de precipitaciones, que ha aislado comunidades enteras como consecuencia de inundaciones y crecidas de los ríos.
Según Defensa Civil, 15 de los 21 muertos notificados en ese estado ocurrieron en Muçum, donde las lluvias han sumergido bajo el agua a buena parte del municipio y muchos vecinos se han visto obligados a refugiarse en el techo de sus casas.
O Rio Grande está em luto. Já são 21 vítimas confirmadas em decorrência das chuvas que começaram no domingo. Estamos consternados com a letalidade desse evento climático e mobilizados para salvar todos que ainda correm perigo. pic.twitter.com/CaaA2E9Ch8
— Eduardo Leite (@EduardoLeite_) September 5, 2023
Leite señaló que la cifra de fallecidos puede subir en las próximas horas, debido a que sólo este martes el nivel del agua comenzó a bajar, permitiendo la inspección de los servicios de rescate en las zonas más afectadas.
"Cuando el agua baje, veremos los daños" en toda su magnitud, afirmó el gobernador, que también expresó su preocupación por las previsiones meteorológicas, que anticipan más precipitaciones durante el fin de semana.
Asimismo, subrayó que la prioridad ahora es "rescatar" a las familias incomunicadas, para lo cual están involucrados cientos de efectivos de Defensa Civil, el Cuerpo de Bomberos, las Fuerzas Armadas y grupos de voluntarios.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, expresó este martes su solidaridad con las familias afectadas y prometió "hacer todo lo posible para ayudar a la población" a superar este momento.
