Se descartó que el tumor se haya extendido a otras partes del cuerpo.
El doctor Arthur Kats afirmó que el ex mandatario podrá hacer "vida normal dentro del tratamiento".
El ex presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva recibió este martes el alta médica y abandonó el hospital al que ingresó el lunes para someterse a la primera sesión de quimioterapia dentro del tratamiento contra el cáncer de laringe que padece.
El político, quien no hizo declaraciones a la prensa, dejó el centro de salud, ubicado en Sao Paulo, cerca de las 15:45 horas local (14:45 de Chile) por una puerta trasera con destino a su residencia, en el municipio próximo de Sao Bernardo do Campo.
Lula estaba en compañía de su esposa, Marisa Leticia, constató Efe.
El doctor Arthur Kats, miembro del equipo médico que atiende el caso, declaró que el ex mandatario se encontrará cansado en los próximos días y que puede hacer "vida normal dentro del tratamiento", por lo que tendrá que limitar su agenda de trabajo.
Los especialistas sometieron este martes a Lula a una tomografía por emisión de positrones (PET) con la que se descartó que el tumor se haya extendido a otras partes del cuerpo, según confirmó el cardiólogo Roberto Kalil.
El profesional aseguró que el político ya recuperó su voz normal y descartó que la quimioterapia haya causado cualquier tipo de efecto colateral.
Está previsto que Lula regrese al hospital dentro de unas tres semanas para continuar con el tratamiento y hasta entonces permanecerá en su domicilio, donde recibirá la medicación a través de un catéter.
