Presidente colombiano prometió acciones para detener la violencia en Medellín

El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, prometió este martes tomar medidas para evitar que el crimen organizado siga "haciendo de las suyas" en la cuidad de Medellín, donde la guerra de pandillas dirigidas por narcotraficantes y paramilitares ha provocado más de 1.250 muertes en este año.

Santos anunció estudios para cambiar las leyes, con el objetivo que no persista la sensación de impunidad, "muy dañina" para el país, y el análisis de otras medidas para que la parte operativa sea "más eficaz", tras encabezar un consejo de seguridad en la base aérea de Rionegro, cerca de Medellín, en el noroeste del país.

"Vamos a establecer unos procesos para estudiar rápidamente qué tipo de cambios normativos hay que presentarle al Congreso para que el Congreso apruebe, lo más rápido posible, cambios en la ley que no permitan que siga esta sensación de impunidad, que es muy dañina para el país", dijo Santos al término de ese consejo de seguridad.

También explicó que la Fiscalía, el Ministerio de Defensa y la Policía Nacional van a hacer un análisis en los próximos días "para ver en qué forma la parte operativa se puede mejorar, se puede hacer más eficaz".

El presidente se reunió en la base de Rionegro con autoridades civiles y militares de Medellín, entre ellas su alcalde, Alonso Salazar, quien le pidió apoyo la semana pasada para hacer frente al desbordamiento de la violencia que sufre la ciudad desde hace meses.

"Tengan la absoluta seguridad de que el Estado todo va a controlar esta situación y el crimen organizado no va a continuar haciendo de las suyas", prometió Santos.

Hasta el pasado 31 de julio, 2.266 personas habían abandonado sus hogares acosados por la violencia, mientras que los asesinatos ascendían a 1.250, sin contar los registrados en agosto, informó a EFE recientemente el personero de Medellín, Jairo Herrán, cuya misión es velar por los derechos humanos en la ciudad.