Las mujeres, familiares de opositores detenidos en 2003, fueron rodeadas e insultadas durante más de dos horas.
"Mercenarias", "terroristas", "locas" y "traidoras" fueron algunos de los epítetos que recibieron.
Las miembros de la agrupación "Damas de Blanco" -familiares de 75 disidentes cubanos encarcelados en 2003, que visten ese color como símbolo de paz- fueron nuevamente hostigadas por partidarios del Gobierno, que las acorralaron e insultaron en la calle durante dos horas y media para impedir su habitual marcha de los domingos.
Las miembros de la organización ratificaron que seguirán protestando, pese a los hostigamientos.
El incidente se produjo a la salida de una iglesia, donde nueve mujeres de este grupo acudieron, como todas las semanas, a la misa dominical para iniciar después su marcha pacífica con la que piden la libertad de sus familiares. Sin embargo, un policía les ordenó retirarse del lugar por no haber solicitado permiso para realizar esa "actividad", a lo que las mujeres se negaron.
"Cuando exista una ley en Cuba que diga que hay que pedir permiso para caminar por las calles de Cuba, entonces nosotras lo vamos a hacer (pedir permiso por escrito para marchar) pero también cuando nos reconozcan como movimiento, como organización, como grupo", le dijo al agente la vocera Berta Soler.
Luego de aquél diálogo, las mujeres comenzaron a gritar "libertad, libertad" y en ese momento decenas de partidarios del Gobierno las rodearon y comenzaron a corear consignas en favor de la Revolución cubana y de sus líderes, así como insultos contra las activistas.
"Mercenarias", "terroristas", "locas", "marionetas", "traidoras" o "cucarachas" fueron algunos de los calificativos que los seguidores del Gobierno dirigieron contra las mujeres, que quedaron cercadas en el centro del grupo durante dos horas y media, de pie y bajo el sofocante sol habanero.
El acto de repudio finalizó con el desalojo de las mujeres, a las que obligaron a subir a un autobús.
