Ángel Carromero, del gobernante Partido Popular hispano, estuvo retenido desde julio en Cuba.
El régimen castrista lo acusó de ser el "único responsable" de la muerte del disidente.
El ciudadano español Ángel Carromero, dirigente del gobernante Partido Popular, volverá esta semana a Madrid tras pasar cinco meses retenido en Cuba, acusado de ser el responsable único de la muerte, en julio, del famoso disidente Oswaldo Payá.
Carromero fue declarado culpable del delito de "homicidio imprudente" debido a que, según la Fiscalía, conducía a 120 kilómetros por hora en un sector en el que máxima permitida era de 60 km/h, y en una vía que, además, se encontraba en reparación.
En el accidente del pasado 22 de julio falleció también el dirigente Harold Cepero. En el mes de octubre Carromero fue condenado y enviado a prisión.
Según fuentes citadas por el diario español El Mundo, autoridades de ambos países llegaron a un acuerdo para que el político purgue en España la condena de cuatro años de cárcel que se le impuso en la isla.
La autorización fue aprobada por el Consejo de Ministros de Cuba el pasado 14 de diciembre y se pensaba que se concretaría antes de Navidad, pero se pospuso.
El diario La Razón indicó que la llegada de Carromero podría concretarse "entre hoy y mañana", y que, si bien al llegar al arribar a Madrid deberá ingresar en una prisión, la Dirección General de Instituciones Penitenciarias le podría otorgar el tercer grado o concederle un permiso de salida de unos días.
Así, iría a dormir de domingo a jueves a un Centro de Inserción Social y por las mañanas podría realizar su actividad laboral normal y pasar en libertad los fines de semana.
La familia de Oswaldo Payá, uno de los más importantes disidentes al régimen de los hermanos Castro, ha rechazado desde el principio la versión oficial del incidente y reclamado una investigación transparente sobre lo ocurrido.
