Señaló que su país será castigado por decidir no pagar la deuda exterior.
Propuso un "preámbulo" a una moneda física regional en América Latina.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, pidió apoyo internacional para evitar que su país sea "aplastado" por decidir no pagar la deuda exterior "ilegítima, corrupta e ilegal", en un discurso realizado en Venezuela, en una reunión de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA).
"Sin apoyo de nuestros hermanos, a Ecuador se lo puede aplastar", manifestó Correa, en alusión a instancias y gobiernos que, auguró, pretenderán darle una respuesta de tal magnitud a su país, que la presentarán para que sirva de ejemplo al mundo.
Con ese ejemplo, los organismos multilaterales pretenderán, según Correa, dar un escarmiento para que ningún otro país en desarrollo se atreva a crear una Comisión para la Auditoría Integral del Crédito Público (CAIC), como lo hizo su Gobierno.
El informe de la CAIC menciona supuestas irregularidades en algunos tramos del endeudamiento de Ecuador, lo que llevó a Correa a advertir que librará "batallas" legales para no pagar.
"Pedimos respaldo. Necesitamos mucho apoyo en esto, una vez que hemos decidido hacer frente a esta clamorosa ilegalidad", reiteró.
Crisis financiera internacional
En lo que respecta a alternativas para mitigar los efectos de la crisis financiera internacional, razón de ser de la reunión del ALBA convocada por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, Correa reiteró alguno de los planteamientos que efectuó en la reciente cumbre Iberoamericana celebrada en El Salvador.
Pidió al ALBA concluir esta cumbre formalizando la creación de un "mecanismo de compensación comercial" expresada en una moneda contable, "preámbulo a una moneda física" regional, como lo que rigió en Europa antes de la creación del euro.
"Esto no es nada nuevo", pero de esta manera, explicó, "minimizaremos el uso de una moneda extra regional", específicamente el dólar estadounidense que "no necesitamos", remarcó.
