Presidente ecuatoriano se presentó ante 500 conciudadanos en Nueva York.
Manifestó su esperanza en que mejore el trato a los migrantes.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, afirmó que las relaciones de su país con EE.UU. y la administración del presidente Barack Obama "están en un excelente momento" y expresó su confianza de un cambio en las políticas migratorias bajo el nuevo Gobierno.
"Percibimos una nueva visión, una apertura, una mejor comprensión del tema migratorio" en EE.UU, afirmó Correa, quien visitó Nueva York para participar de los debates de la Asamblea General de la ONU, que busca solución a la crisis financiera global.
Mencionó que el canciller ecuatoriano se reunió con la secretaria de estado de EE.UU., Hillary Clinton, con quien conversó sobre las leyes migratorias de este país.
"Tenemos la esperanza de que pronto cambien las políticas represivas que se aplicaron durante la administración (del presidente George) Bush y se empiece a respetar a los migrantes, sobre todo a los migrantes ecuatorianos", afirmó el mandatario en un encuentro con sus compatriotas de Nueva York y estados vecinos.
Correa fue recibido con gran euforia por unos 500 inmigrantes en el salón de actos de la iglesia de los dolores en Queens, algunos de los cuales vestían una camiseta amarilla, uno de los colores de la bandera, otros la llevaban verde y otros blanca, con mensajes de "migrantes con Correa" y "todos somos migrantes".
Junto al escenario desde el cual Correa habló a sus compatriotas, en Queens, donde vive el mayor número de ecuatorianos en esta ciudad, fue desplegada una pancarta con el mensaje: "estamos arreglando la casa para que vuelvan".
Decenas de otros ecuatorianos que no pudieron entrar a la iglesia siguieron el evento desde una pantalla y altavoces colocados en el exterior de la iglesia.
El mandatario agradeció a su comunidad el apoyo que han dado al país a través de las remesas y aseguró que como resultado de las políticas que ha puesto en marcha en Ecuador ya han regresado al Ecuador 20.000 emigrantes.
"Algunos han puesto sus negocios y les va bastante bien", afirmó.
Destacó que la migración masiva que ocurrió en su país en los pasados diez años, a partir de la crisis financiera de 1999 "es el más fiel reflejo del fracaso de las políticas económicas y sociales que prevalecían en Ecuador antes de la revolución ciudadana", como llama a su Gobierno, y que defendió durante su mensaje, que dedicó la mayor parte del tiempo a rendir cuentas de su obra.
