Emulando la triste historia de Berlín, Estados Unidos podrá ahora levantar una valla en la frontera con México, para impedir la llegada de más "espaldas mojadas".
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, promulgará este jueves 26 de octubre la llamada "ley del muro", que autoriza la construcción de una doble valla en la frontera con México, como parte de un plan para reforzar la seguridad en la zona y prevenir la inmigración ilegal..
La firma de la ley se llevará a cabo en la Oficina Roosevelt de la Casa Blanca, dijo una fuente oficial.
El anuncio sobre la firma de la ley ocurrió después de que el Congreso enviara este lunes al presidente el proyecto de ley, aprobado por el Senado en septiembre, como parte de un plan para evitar el arribo de los "espaldas mojadas".
"Esta legislación es un componente clave para la seguridad de EE.UU. y atajar el flujo de la inmigración ilegal. El pueblo estadounidense exige una frontera segura y este Congreso republicano ha respondido" a esa demanda, indicaron en un comunicado conjunto lo líderes parlamentarios del partido de Bush.
El presidente de la Cámara de Representantes y el líder de la mayoría republicana en el Senado, Dennis Hastert y Bill Frist, respectivamente, explicaron que la ley aumenta las barreras físicas y la infraestructura fronteriza, y provee tecnología de punta para reforzar la vigilancia.
La semana pasada, el diario The Washington Times dijo que, pese a las presiones de la Casa Blanca, los republicanos aún no enviaban la legislación al despacho presidencial porque preferían esperar hasta poco antes de las elecciones, del 7 de noviembre, para dar un mayor golpe publicitario.
La oposición demócrata favorece un plan de reforma migratoria integral, que incluye un programa de trabajadores huéspedes y una vía para la legalización de buena parte de los 12 millones de inmigrantes indocumentados que se calcula viven en el país.
Hastert y Frist señalaron que el plan demócrata -que cuenta con el aval de la Casa Blanca- sería un "fracaso", permitiría la entrada a EE.UU. de "criminales peligrosos" y supondría un revés para la seguridad nacional. (EFE)
