Luego de que ETA rompiera el alto al fuego al colocar un auto bomba en el aeropuerto de Barajas, el vocero Arnaldo Otegi llamó a la organización a mantener intactos los acuerdos explicitados en su comunicado del 22 de marzo.
El portavoz del brazo político de ETA -la ilegalizada Batasuna-, Arnaldo Otegi, pidió este lunes a la organización armada que mantenga los postulados que le llevaron a anunciar hace nueve meses y medio un alto al fuego permanente.
La tregua la rompió ETA el pasado 30 de diciembre al colocar un auto bomba en el aeropuerto madrileño de Barajas, causando la muerte a dos ciudadanos ecuatorianos.
En una conferencia de prensa ofrecida en San Sebastián, sin permitir
preguntas, Otegi, que no ha condenado el atentado de Barajas, pidió
a la organización vasca que "mantenga intactos los contenidos y objetivos explicitados en su comunicado del 22 de marzo", en el que anunció el alto al fuego.
Según ese comunicado, leído por un encapuchado, el objetivo de ETA era "impulsar un proceso democrático en Euskal Herria (País Vasco) para construir un nuevo marco en el que sean reconocidos los derechos que como pueblo nos corresponden y asegurando de cara al futuro la posibilidad de desarrollo de todas las opciones políticas".
Además de dirigirse al grupo armado, el vocero de Batasuna apeló al Gobierno español a que "garantice las condiciones democráticas" para facilitar un proceso de diálogo. Según señaló, ese diálogo "tiene que desarrollarse necesariamente en ausencia de cualquier tipo de violencia".
A raíz del atentado en los estacionamientos del aeropuerto de Madrid, el jefe del Gobierno español, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, dio por finalizado el proceso de diálogo con ETA y comenzó los contactos con el resto de las fuerzas políticas para acordar una nueva política antiterrorista.
La primera reunión, con el líder del opositor Partido Popular (PP), Mariano Rajoy, se fijó para este lunes, antes de que el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, abra este martes una ronda con los voceros parlamentarios.
El encuentro se celebra después de que miles de españoles guardaran cinco minutos de silencio para condenar el atentado de Barajas y honrar a las víctimas, los ecuatorianos Carlos Alonso Palate y Diego Armando Estacio, cuyos cadáveres ya fueron repatriados a su país. (EFE)
