Vehículos, mobiliario público e incluso árboles fueron quemados por desconocidos, que siguen patrones similares a los de activistas galos.
Un total de 11 automóviles fueron incendiados la noche del pasado viernes en diferentes puntos de Bélgica, nueve de ellos en Bruselas, en la peor jornada de disturbios desde el inicio de la violencia en los barrios marginales franceses, que ya tiene seguidores en el vecino país.
En la capital belga, nueve automóviles, una casa rodante, varios basureros y árboles fueron quemados por desconocidos, según informó la policía.
Los bomberos tuvieron que actuar en 18 ocasiones, agregó la agencia Belga.
Los barrios más afectados fueron Molenbeek, Schaerbeek y Saint-Gilles, de alta concentración de población de origen inmigrante. En otras dos ciudades del oeste del país, Mouscron y Coxyde, se produjeron también incendios de automóviles.
En Coxyde, cerca de 40 personas tuvieron que pasar parte de la noche en un hotel, ya que uno de los fuegos se produjo en un estacionamiento subterráneo y el humo inundó varios departamentos superiores.
Los incidentes configuraron la peor noche de violencia en Bélgica desde el inicio de los disturbios en Francia, aunque las autoridades de Bruselas han insistido en que se trata de incidentes aislados, pues consideran que en este país no hay ciudades marginales y la integración es mejor que en la vecina nación.
Desde el inicio de la violencia en Francia ha habido incidentes en numerosas ciudades belgas, aunque de escasa importancia. Sin embargo, la policía mantiene un dispositivo especial ante la posibilidad de disturbios en el centro de Bruselas, tras la llamada a la violencia detectada en un blog de internet.
Más de 250 policías y medios antidisturbios han sido movilizados para actuar en caso necesario en el centro de la capital, mientras que al menos otros 80 agentes están preparados en otras zonas de la ciudad. (EFE)
