La oposición moderada no necesitará aliarse con sectores de izquierda para formar un nuevo Ejecutivo, que el 16 de octubre reemplazará a la coalición de centro-derecha en el poder.
La alianza roji-verde que lidera el laborista Jens Stoltenberg, de 46 años, ganó definitivamente las elecciones parlamentarias celebradas en Noruega, en las que votó el 76,1 por ciento de los ciudadanos habilitados.
Según anunció la Comisión Electoral, tras completarse el 97,4 por ciento del escrutinio, la alianza formada por el Partido Laborista (AP), el Partido de la Izquierda Socialista (SV) y el Partido Centrista (SP) obtuvo 88 escaños de los 169 que compondrán el Parlamento durante la próxima legislatura.
Sus rivales inmediatos, el bloque de centro-derecha que encabezó el primer ministro, Kjell Magne Bondevik, logró 81 escaños.
Los resultados de las elecciones obtenidos por la alianza roji-verde hacen innecesario buscar el apoyo de la comunista Alianza Electoral Roja, formación que estaba dispuesta a sumar sus votos para asegurar un cambio de gobierno en Noruega.
El partido más votado fue el Laborista, que subió el 8,3 por ciento que logró en las elecciones de 2001 y se sitúo en el 32,8 por ciento, seguido del Partido del Progreso, que se confirma como la segunda fuerza política del país con el 22,1 por ciento del cómputo.
Respecto al gubernamental bloque de centro-derecha de Bondevik, el único que obtuvo resultados satisfactorios fue el Partido Liberal, lo que constituyó una sorpresa. Contraviniendo los pronósticos, la tienda superó el umbral del cuatro por ciento, y logró el 5,1 por ciento del escrutinio, lo que le otorga ocho escaños más que en el 2001.
El Partido Conservador perdió respecto a las elecciones del 2001 siete por ciento de votos -traducidos en 15 escaños-, mientras que el Partido Demócrata Cristiano de Bondevik retrocedió 5,6 puntos y perdió 11 asientos.
Stoltenberg prometió un gobierno paritario entre géneros
El laborista Jens Stoltenberg formará en Noruega un gobierno con el 50 por ciento de los cargos ocupados por mujeres, según anunció tras ganar las elecciones legislativas del pasado lunes, en las que compitió con los partidos de la Izquierda Socialista y
Centrista, ambos dirigidos por féminas.
Stoltenberg relevará al premier Kjell Magne Bondevik el 16 de octubre próximo, dos días después de la presentación de los presupuestos generales para el año 2006.
"Tengo muchas ganas de ser primer ministro, porque es un trabajo importante y significativo y porque quiero llevar a Noruega en la buena dirección", declaró Stoltenberg.
El líder laborista agregó que "lo primero que hay que hacer es crear una plataforma política antes de comenzar a repartir ministerios", al tiempo que aseguró que el gobierno paritario reflejará la distribución de sexos en su partido a nivel nacional.
Asimismo, Stoltenberg manifestó que espera duras rondas de negociaciones con sus socias, Aslaug Haga, del Partido Centrista; y Kristin Halvorsen, de la Izquierda Socialista; porque aún hay temas en los que no coinciden, como la exploración de crudo en el Mar de Barents, la construcción de fábricas eléctricas propulsadas por gas o la entrada del país a la Unión Europea (UE). (EFE)
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