Aníbal Cavaco deberá impulsar un exigente plan de austeridad para recibir la ayuda.
UE aprobó ayuda de 78 mil millones de dólares para levantar la economía lusa.
El presidente de Portugal, Aníbal Cavaco Silva, instó este martes al país a cumplir los compromisos del rescate financiero luso aprobado esta jornada por la Unión Europea (UE), que reconoció será una prueba "muy exigente".
En
un breve mensaje, el mandatario consideró muy importante, tanto para Portugal como para Europa, la aprobación de la ayuda a su país, que suma 78.000 millones de dólares, de los que dos terceras partes serán aportadas por la UE y el resto por el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Los ministros europeos de Finanzas, reunidos desde el lunes en Bruselas, dieron el visto bueno al rescate financiero que una delegación de Bruselas y el FMI negoció con el gobierno portugués en el último mes.
Cavaco expresó la responsabilidad que tiene ahora Portugal para honrar sus compromisos financieros y, al mismo tiempo, "encontrar un espacio para la justicia social y el desarrollo".
La aplicación de los acuerdos financieros con la UE implican un programa de reformas y ajustes para sanear la economía portuguesa, que será "muy exigente" y "pondrá a prueba la capacidad de las fuerzas políticas" lusas, admitió Cavaco.
Portugal se comprometió con la UE y el FMI a reducir a una tercera parte el déficit de las finanzas del Estado, para que baje al 3 por ciento en sólo dos años y medio, así como a mejorar su competitividad con reformas laborales y medidas de liberalización económica.
