Entre las víctimas se encuentra un capitán de policía que murió cuando intentaba proteger a la población civil.
Según datos de la ONU, 9.000 personas han muerto en el este de Ucrania.
Ucrania acusa a las fuerzas de la autoproclamada república popular de Donetsk de violar los Acuerdos de Paz.
Dos soldados ucranianos han muerto en las últimas 24 horas en la región oriental de Donetsk en escaramuzas entre las fuerzas gubernamentales y las milicias prorrusas, que amenazan la tregua navideña declarada a finales del pasado año.
Los dos militares perdieron la vida en la localidad de Maiorsk, no lejos de Górlovka, uno de los principales bastiones separatistas, aseguró este domingo en rueda de prensa Alexandr Moruzianik, portavoz de la Presidencia ucraniana.
Según la fuente, uno de ellos, un capitán de policía, murió cuando intentaba proteger a la población civil de los ataques protagonizados por las milicias insurgentes.
Moruzianik acusó a los separatistas de bombardear edificios de viviendas y de herir también a una mujer al atacar un automóvil que trasladaba a un grupo de civiles.
El segundo militar habría muerto al ser alcanzado por la metralla durante un ataque con mortero contra las posiciones de las fuerzas gubernamentales.
Ucrania acusa a las fuerzas de la autoproclamada república popular de Donetsk de violar los Acuerdos de Paz de Minsk al romper el cese del fuego y utilizar armamento prohibido, desde morteros y ametralladoras de gran calibre, a tanques y blindados.
Por su parte, los separatistas reconocieron una baja en sus filas, un miliciano que fue abatido anoche por un francotirador enemigo al norte de Górlovka.
Ambas bandos ya llevan varios días intercambiando acusaciones de violaciones de la tregua que fue acordada en Minsk el pasado 22 de diciembre.
Los representantes de Kiev y de los separatistas de Donetsk y Lugansk acordaron respetar el nuevo alto el fuego durante las fiestas navideñas, que los ortodoxos celebran durante la primera semana del año.
Ambas partes no se han puesto de acuerdo sobre la convocatoria de elecciones locales en 2016 en las zonas controladas por los rebeldes prorrusos, que aceptaron posponerlas en octubre pasado después de que se acordara prolongar la aplicación de los Acuerdos de Paz.
Rusia acusa a Ucrania de negarse a aplicar la parte política de los Acuerdos de Minsk: reforma constitucional, descentralización, amnistía y concesión de estatus especial a las zonas controladas por los separatistas.
Según los últimos datos de la ONU, en los veinte meses que dura el conflicto más de 9.000 personas han muerto en el este de Ucrania.
