Las masacres ocurrieron este domingo en distintos puntos del país.
Violencia aumentó en los últimos meses en Irak.
El ataque más sangriento se registró en la ciudad de Hila, capital de la provincia de Babel, donde quince personas murieron y otras veinte sufrieron heridas.
Al menos 30 personas murieron este domingo y otras 64 resultaron heridas en una cadena de atentados registrada en Bagdad y en provincias del sur y norte de Irak, informaron a Efe fuentes policiales.
El ataque más sangriento se registró en la ciudad de Hila, capital de la provincia de Babel, donde quince personas murieron y otras veinte sufrieron lesiones, debido al estallido de tres coches bomba cerca de un mercado y una zona de talleres mecánicos.
En el barrio industrial de la ciudad santa chií de Kerbala, 110 kilómetros al sur de la capital, otra explosión provocó el fallecimiento de cerca de 4 personas y 7 heridos.
En tanto, tres habitantes de la zona de Jamsa Mil, al sur de la localidad de Basora, 560 kilómetros al sur de Bagdad murieron, dejando a otros dos con lesiones por el estadillo de un coche bomba.
Por otro lado, en una carretera en el norte de la provincia de Salahedín - al norte de Bagdad -, varios hombres armados obligaron a tres personas que viajaban en un vehículo a bajarse y las tirotearon hasta la muerte, antes de darse a la fuga.
Además, dos personas fallecieron y diez más resultaron heridas por explosiones cercanas a un restaurante en la localidad de Al Hafriya, en la provincia de Waset, al sur de Bagdad.
Además, en el barrio de Waziriya, un coche bomba estalló del convoy del alcalde de la capital, Riad al Adad, que salió ileso del ataque. A pesar de ello, hubo un muerto y cuatro heridos en el mismo.
En las zonas de Abu Ghreib (25 kilómetros al oeste de Bagdad), y Abu Deshir, al sur de la capital, una persona falleció y dos resultaron heridas por el explosión de artefactos.
En otro ataque, un guardia de seguridad que trabajaba en una instalación petrolera en el sur de Mosul, 400 kilómetros al norte de Bagdad, pereció por disparos de hombres armados cuando se encontraba delante de su casa.
Otros dos coches bomba explotaron en distintos lugares en la ciudad de Naseriya, capital de la provincia de Ziqar (350 kilómetros al sur de Bagdad), causando lesiones a personas; mientras que una explosión similar dejó un herido en el centro de la ciudad de Kut, capital de la provincia de Waset.
La violencia aumentó en los últimos meses en Irak, donde el sábado murieron 25 personas en un atentado suicida perpetrado durante un velatorio que se celebraba en una población cerca de Mosul.
