El primer ministro indicó que "nuevos acontecimientos lo obligaron a cambiar de programa".
Es investigado por fraude fiscal en caso Mediaset.
El presidente del gobierno italiano, Silvio Berlusconi, envió una carta a los jueces en la que alega problemas de agenda para no presentarse a la audiencia del caso Mediaset, en el que está imputado por fraude fiscal.
En la misiva, entregada por sus abogados, Berlusconi explica que "nuevos acontecimientos le han obligado a cambiar de programa", a pesar de que se había garantizado su presencia.
El primer ministro italiano añade que su ausencia también está justificada ya que en la vista de este lunes "se tratarán únicamente cuestiones procesales" e invita a los jueces a proseguir sin su presencia.
Asimismo, Berlusconi asegura que tenía intención "de realizar una declaración espontánea" ante los jueces, pero que sus abogados le explicaron que "habría sido un error" hacerlo en este momento del proceso.
El proceso debió reiniciarse el pasado 26 de noviembre, después de que el Tribunal Constitucional anuló la ley que daba la inmunidad a los cuatro altos cargos del país y que suponía la suspensión de los dos procesos pendientes contra Berlusconi.
Los letrados que representan a Berlusconi, Niccolò Ghedini y Piero Longo, pidieron posponer el reinicio del juicio porque el primer ministro tenía compromisos institucionales e indicaron a los jueces el 18 y el 25 de enero como las fechas en las que el mandatario podría comparecer.
El proceso se ocupa de la compraventa de los derechos de transmisión de películas estadounidenses por parte de Mediaset, grupo televisivo propiedad de Berlusconi.
La fiscalía sospecha que se aumentó de forma artificial el precio real de los derechos, se desviaron a cuentas en el extranjero cerca de 280 millones de euros y se eludió al fisco el equivalente a unos 170 millones de euros entre 1994 y 1996.
