En febrero, la producción global de las compañías niponas bajó abruptamente.
Se estima que en 2009, la venta de vehículos sólo llegará a 4.297.600 unidades.
Febrero fue un mes de números rojos para las principales empresas automotrices japonesas, ya que durante ese período, los niveles de producción global, exportaciones y ventas domésticas, experimentaron caídas de entre 33,5 y 62,7 por ciento, en comparación a enero.
Ante este retroceso y la contracción de la demanda provocada por la crisis económica, los fabricantes nipones optaron por recortar su producción mundial entre 35 y 54,6 por ciento durante el mes pasado.
Ante este panorama, la Asociación de Fabricantes de Vehículos de Japón (JAMA) pronosticó este martes una caída de ocho por ciento interanual de las ventas de vehículos a nivel local para los próximos doce meses.
La entidad prevé la venta de 4.297.600 vehículos, el nivel más bajo registrado desde 1977, cuando se comercializaron 4,23 millones de unidades.
"Hay signos de que los datos de demanda que veníamos anticipando van a debilitarse incluso más", señaló al respecto el presidente de JAMA, Satoshi Aoki.
