Los medios locales estimaron en 150 mil los casos.
Sucedieron en las décadas de los 50, 60, 70 y parte de los 80 del siglo pasado.
Los hospitales católicos australianos pidieron perdón este lunes por las adopciones forzosas que efectuaron en las décadas de los 50, 60, 70 y parte de los 80 del siglo pasado, una cifra que los medios australianos sitúan en unos 150.000 casos.
"Estas prácticas del pasado son profundamente lamentables", señala en un comunicado Catholic Health Australia, el mayor operador de hospitales del país, que precisa que en la actualidad son "impensables".
La Iglesia católica australiana fundó esta organización para gestionar sus hospitales y centros de acogida de la tercera edad, de los que en la actualidad tiene 75 y 550, respectivamente.
La petición de perdón se produce cuando el Parlamento federal de Australia lleva a cabo una nueva investigación sobre el asunto.
Las madres fueron engañadas, otras presionadas y algunas hasta amenazadas para que firmasen los papeles de adopción de sus hijos, según otra investigación oficial de 2000.
"Reconocemos el dolor que sintieron y aún sienten por la separación y la pérdida las madres, los padres, los hijos, las familias y otras personas que pudieron estar implicadas en aquellas prácticas propias de la época (...) Por su dolor, pedimos sinceramente perdón", se dijo en el mensaje.
El director gerente de Catholic Health Australia, Martin Laverty, señaló que la disculpa permitirá agilizar la actuación del Gobierno para adoptar un plan nacional de ayuda a las víctimas.
