Los 29 trabajadores llevaban seis días atrapados bajo tierra.
Tras segunda explosión en el yacimiento, las autoridades los dieron por muertos.
El primer ministro de Nueva Zelanda, John Key, advirtió este jueves que puede durar meses recuperar los cuerpos de los 29 mineros que murieron en el yacimiento de Pike River, uno de los peores accidentes mineros que ha sufrido el país.
Los mineros, que llevaban seis días atrapados bajo tierra, fueron dados por muertos el jueves tras una segunda explosión de gas dentro de las galerías.
Key dijo que experiencias internacionales precedentes han mostrado que la operación puede tardar "unos cuantos meses" y advirtió de que en el interior de los pozos todavía hay elevadas concentraciones de gases volátiles.
"El rescate tiene que hacerse de manera que sea seguro para aquellos que lleven a cabo esta misión", añadió Key, que se desplazó hasta Greymouth para estar con los familiares de las víctimas.
Nueva Zelanda vive una jornada de luto, con las banderas ondeando a media hasta, mientras las autoridades han puesto en marcha varias investigaciones para esclarecer las causas del accidente.
"Necesitamos respuestas a lo que ha pasado en Pike River. Es evidente que algo fue terriblemente mal y costó la vida a 29 personas", dijo el primer ministro.
