Mandatario peruano desmintió cualquier intención de intervenir en el curso de las elecciones.
El ex presidente es el favorito en las elecciones del próximo 10 de abril.
El presidente peruano, Alan García, dijo este miércoles que "quiere mucho" a su antecesor Alejandro Toledo, pero que éste sufre una especie de "obsesión sicosexual" al ver en él un enemigo, en referencia a las acusaciones de que se inmiscuye en la campaña electoral.
"Quiero mucho a Alejandro, él no tiene que ver en mí un enemigo, pero a veces tiene una cierta manía en decir que no lo quiero, o que yo sé fascinar a hombres y mujeres, y eso parece una obsesión sicosexual", dijo García a los periodistas en el Palacio de Gobierno.
Toledo, favorito en las encuestas de intención de voto para las elecciones presidenciales del próximo 10 de abril, viene acusando en las últimas semanas a García de entrometerse en las elecciones contra su candidatura, apoyando a sus rivales Luis Castañeda o Keiko Fujimori.
En tono jocoso, García desmintió cualquier intención de intervenir en el curso de las elecciones, y atribuyó las acusaciones de Toledo a su "tendencia a bajar" en los sondeos electorales.
El candidato del partido Perú Posible se mueve en torno a un 28 por ciento de intención de voto, con una leve bajada en la última semana, aunque también sus inmediatos rivales, Keiko y Castañeda, están bajando, descensos que parecen haber aprovechado el nacionalista Ollanta Humala (16 por ciento) y el economista Pedro Pablo Kuczinsky (10 por ciento).
García dejará su cargo el 28 de julio próximo, sin descartar presentarse para un tercer mandato en las siguientes elecciones de 2016.
