A dos semanas de las elecciones parlamentarias en Rusia, el último dirigente soviético, Mijaíl Gorbachov, acusó este lunes en Berlín al primer ministro ruso, Vladímir Putin, de llevar a cabo una campaña electoral sucia, al tiempo que advirtió de manipulaciones en el escrutinio.
"En realidad es vergonzoso", declaró el ex líder soviético, que denunció la ausencia de elecciones libres y el déficit democrático, lo que considera como los mayores problemas de Rusia.
Según Gorbachov, "hay que comenzar nuevamente de cero, es decir, hay que volver a empezar con la construcción de la democracia".
Además, lanzó graves acusaciones contra el jefe del gobierno ruso y contra su partido, Rusia Unida, y señaló que las autoridades regionales han sido encomendados a garantizar una determinada participación electoral para que la formación oficialista consiga la mayoría.
El próximo 4 de diciembre, Rusia celebra elecciones legislativas, preludio de los comicios presidenciales de marzo de 2012, donde Putin aspirará de nuevo a la jefatura de estado, que ya ocupó entre 2000 y 2008 tras suceder a Borís Yeltsin.