Utilizan las copias para entregarlas a prestamistas y evitar los pagos.
El Gobierno respondió multiplicando por siete el precio de renovación de las tarjetas.
Cerca de cinco millones de sudafricanos tienen en su poder más de un documento nacional de identidad, informó este martes la ministra del Interior de Sudáfrica, Nkosazana Dlamini-Zuma.
Millones de sudafricanos atesoran copias de sus documentos de identidad para poder entregarlos como fianza a los prestamistas y desentenderse de sus obligaciones.
Solo el año pasado, el departamento de Interior de Sudáfrica emitió 1,3 millones de duplicados, según revela el sistema gracias a la fecha de renovación.
"Algunos pierden de verdad sus DNI, pero otros los entregan a los prestamistas y luego simplemente piden uno nuevo", aseguró la ministra Nkosazana Dlamini-Zuma.
El coste para el Gobierno sudafricano de esta práctica tan extendida ha llevado al departamento de Interior a multiplicar por siete el precio de renovación de las tarjetas identificativas, que pasará de costar 20 rand (casi 1.400 pesos) a 120 rands (más de 8.300 pesos).
La titular de Interior mostró su preocupación, además, por los más de 750 mil carnets que descansan en las comisarías sudafricanas a la espera de que sus dueños se acerquen a recogerlos. "Es una pérdida de tiempo y dinero, y abre la puerta a posibles casos de corrupción", aventuró Dlamini-Zuma.
